Cánticos

Un cántico, del latín canticulum (diminutivo de canticum, que significa «canto»), es un himno o cántico sagrado que se encuentra en la Biblia y se utiliza en la liturgia cristiana. Se distingue de los salmos, aunque ambos son formas de canto sagrado, y posee un significado profundo en la expresión de alabanza, acción de gracias, arrepentimiento y esperanza. Los cánticos son una parte integral de la oración comunitaria y personal en la Iglesia Católica, enriqueciendo las celebraciones litúrgicas y fomentando una mayor cercanía con Dios.
Tabla de contenido
Definición y Distinción
El término «cántico» en las traducciones católicas de la Biblia al inglés es el equivalente de la palabra latina canticum cuando se refiere a un canto sagrado. Sin embargo, en otros contextos, canticum puede traducirse simplemente como «canto», refiriéndose a canciones seculares o de burla1. A diferencia de la versión autorizada protestante, que generalmente usa «canción», la traducción católica hace una distinción explícita para los cantos sagrados1.
Una distinción importante es que, si bien un cántico puede existir sin un salmo, un salmo no puede existir sin un cántico, según San Agustín1. Esta distinción subraya la naturaleza fundamental del cántico como una forma de expresión musical de la fe.
Cánticos en la Liturgia Católica
Los cánticos ocupan un lugar prominente en la liturgia católica, especialmente en la Liturgia de las Horas, donde se utilizan para santificar el día2.
Cánticos del Antiguo Testamento
El Breviario Romano incluye siete cánticos del Antiguo Testamento para su uso en Laudes a lo largo de la semana1:
Domingos y Fiestas: El «Cántico de los Tres Jóvenes» (Daniel 3:57)1.
Martes: El «Cántico de Ezequías» (Isaías 38:10-20)1.
Miércoles: El «Cántico de Ana» (1 Samuel 2:1-10)1.
Viernes: El «Cántico de Habacuc» (Habacuc 3:2-19)1.
Estos cánticos reemplazan un cuarto salmo en Laudes y se cantan con antífonas y en los ocho tonos de salmo, alternando de manera similar a los salmos1. Para adaptarlos a este formato, algunos versículos bíblicos se dividen en dos en el Breviario1. El «Cántico de los Tres Jóvenes» en particular, utiliza solo una porción del cántico original en Daniel, condensando, expandiendo, omitiendo e invirtiendo versículos1.
Cánticos del Nuevo Testamento (Cánticos Evangélicos)
Del Nuevo Testamento, el Breviario Romano incorpora tres cánticos fundamentales, a menudo llamados «cánticos evangélicos» por su origen en el Evangelio de San Lucas1:
En Laudes: El «Cántico de Zacarías» (Lucas 1:68-79), conocido como el Benedictus1,2.
En Vísperas: El «Cántico de la Santísima Virgen María» (Lucas 1:46-55), conocido como el Magníficat1,3,2.
En Completas: El «Cántico de Simeón» (Lucas 2:29-32), conocido como el Nunc dimittis1.
Estos tres cánticos se cantan diariamente, a diferencia de los del Antiguo Testamento, que tienen una ocurrencia semanal1. Se les otorga una importancia y distinción particular, no siendo colocados entre los salmos, sino separados por el Capítulo, el Himno, el Versículo y la Respuesta, e inmediatamente antes de la Oración1. La rúbrica litúrgica exige que los cantores y la congregación se pongan de pie mientras se cantan estos cánticos, en honor al misterio de la Encarnación al que se refieren1. En las Vísperas Solemnes, el altar se inciensa durante el Magníficat, similar a la Misa Solemne1.
Otros Cánticos y Himnos
Además de los cánticos mencionados, el Breviario Romano también incluye en su índice bajo «Cantica» el Te Deum (al final de Maitines en domingos y fiestas) y el Quicumque vult salvus esse (en Primas los domingos, también conocido como el «Credo de San Atanasio»)1. Algunos escritores también añaden a la categoría de cánticos el Gloria in excelsis, el Trisagion y el Gloria Patri (la Doxología Menor)1.
El Nunc dimittis también se utiliza como tracto en la Misa de la Fiesta de la Purificación, y el Benedictus en los funerales y diversas procesiones1.
El Canto en la Tradición Litúrgica
El canto es una parte esencial de la liturgia, elevando el espíritu y facilitando una mayor intimidad con Dios4. Se considera una forma de ministerio que ayuda a los fieles a alabar al Señor, fomentando la unidad y la oración comunitaria4. San Agustín afirmó: «Quien canta reza dos veces»4.
La Iglesia Católica reconoce el canto gregoriano como el canto propio de la liturgia romana, dándole un lugar de honor en los servicios litúrgicos5,6,7,8,9,10. El canto gregoriano, con su cadencia meditativa, toca las profundidades del alma y expresa una amplia gama de emociones espirituales, haciendo que los salmos cobren vida6. Aunque el canto gregoriano tiene un lugar de primacía, la Iglesia no excluye otras formas de música sacra, incluyendo la polifonía, siempre que sean apropiadas para el espíritu de la celebración litúrgica y fomenten la participación activa de los fieles5,7,9,10.
La música, y el canto en particular, es un lenguaje que favorece la comunión de los corazones, expresando alegría, arrepentimiento, confianza y amor4. La tradición del canto litúrgico ha sido fundamental desde los primeros siglos del cristianismo, contribuyendo a la piedad popular y a la evangelización11.
El canto en lenguas vernáculas está permitido en funciones extralitúrgicas, mientras que el latín y el canto gregoriano son distintivos de la unidad de la fe en la liturgia romana8,12. Es deseable que los fieles de diferentes países sepan cantar al menos algunas partes del Ordinario de la Misa en latín, como el Credo y el Padre Nuestro, con melodías más sencillas9.
Conclusión
Los cánticos son tesoros espirituales incrustados en el corazón de la liturgia católica. Desde los antiguos textos del Antiguo Testamento hasta los conmovedores cánticos evangélicos, estas expresiones de fe musicalizadas sirven como un puente entre la humanidad y lo divino. A través del canto, la Iglesia no solo adora, sino que también se une en oración, profundiza su comprensión de los misterios de la fe y proclama el mensaje de paz y fraternidad al mundo. La preservación y el uso adecuado de los cánticos, especialmente en su forma gregoriana, continúan siendo una fuente vital de gracia y devoción para los fieles católicos.
Citas
Cántico, The Encyclopedia Press. Catholic Encyclopedia, §Cántico. ↩ ↩2 ↩3 ↩4 ↩5 ↩6 ↩7 ↩8 ↩9 ↩10 ↩11 ↩12 ↩13 ↩14 ↩15 ↩16 ↩17 ↩18 ↩19 ↩20 ↩21 ↩22 ↩23 ↩24 ↩25
Capítulo dos. La santificación del día—las diversas horas litúrgicas - II. Laudes y vísperas, Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos. Ordenación General de la Liturgia de las Horas, § 50 (1971). ↩ ↩2 ↩3
Sagrada Congregación para el Culto Divino. De Benedictionibus (Libro de las Bendiciones), § 500. ↩
Papa Juan Pablo II. A los Pueri Cantores con ocasión de su 26º Congreso Internacional (31 de diciembre de 1993) - Discurso, § 3 (1993). ↩ ↩2 ↩3 ↩4
Papa Juan Pablo II. A los miembros del Coro Manuel Iradier en Castel Gandolfo (4 de agosto de 1985) - Discurso (1985). ↩ ↩2
B4. Canto gregoriano, Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos. Discurso principal del Card. Arinze, Prefecto, en la Conferencia Litúrgica Gateway (San Luis - Misuri, 11 de noviembre de 2006), § 4 (2006). ↩ ↩2
Capítulo cinco. Los ritos que deben observarse en la celebración comunitaria - II. El canto en el oficio, Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos. Ordenación General de la Liturgia de las Horas, § 274 (1971). ↩ ↩2
Sagrada Congregación para el Culto Divino - Carta Voluntati obsequens a los obispos, que acompaña al folleto Jubilate Deo, 14 de abril de 1975, Sagrada Congregación para el Culto Divino. Voluntati obsequens (1974). ↩ ↩2
Capítulo II la estructura de la misa, sus elementos y sus partes - II. Los diferentes elementos de la misa - La importancia del canto, Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos. Ordenación General del Misal Romano, § 41 (2003). ↩ ↩2 ↩3
IV. El idioma que debe usarse en las celebraciones litúrgicas cantadas, y sobre la conservación del patrimonio de la música sacra, Sagrada Congregación de Ritos. Musicam Sacram, § 50 (1967). ↩ ↩2
Papa Pío XI. Divini cultus sanctitatem, §Divini cultus sanctitatem (1928). ↩
Música eclesiástica, The Encyclopedia Press. Catholic Encyclopedia, §Música eclesiástica. ↩