Danos hoy nuestro pan de cada día
Danos hoy nuestro pan de cada día es la cuarta petición del Padre Nuestro, oración central del cristianismo que Jesús enseñó a sus discípulos. Esta frase resume la confianza filial en Dios como proveedor de todo lo necesario para la vida humana, al tiempo que alude al pan de la vida que la Iglesia celebra en la Eucaristía. El presente artículo explora su origen bíblico, su significado teológico, su empleo litúrgico, la enseñanza catequética, su dimensión social y la evolución de su traducción en la tradición católica.
Tabla de contenido
Origen bíblico y textual
Evangelios de Mateo y Lucas
El texto del Padre Nuestro se conserva en dos evangelios sinopticos. En Mateo 6,9‑13 aparece la forma más completa, que la Iglesia adoptó para su liturgia1. En Lucas 11,2‑4 la oración es más breve, con cinco peticiones; sin embargo, la petición del pan diario está presente en ambas versiones1. La petición original griega utiliza el adjetivo epiousion, cuya traducción ha generado debate (pan cotidiano, pan necesario o pan del mañana)2.
Significado teológico
Alimentación física y espiritual
El Catecismo de la Iglesia Católica (CCC) explica que «Nuestro pan cotidiano» alude tanto al sustento material necesario para la subsistencia como al «Pan de Vida», es decir, la Palabra de Dios y el Cuerpo de Cristo3. De manera similar, el Compendio del Catecismo señala que la petición expresa el hambre del ser humano por la Eucaristía, que anticipa el banquete del Reino de Dios4. La Enciclopedia Católica subraya que la petición «conoce nuestras necesidades terrenales» y nos invita a confiar en la providencia divina5.
Relación con la Eucaristía
En la liturgia, el pan solicitado es preeminente el pan eucarístico. El General Instruction of the Roman Missal (GIRM) declara que la petición «significa preeminentemente el pan de la Eucaristía»6. El Papa Juan Pablo II afirma que al recitar el Padre Nuestro, «pedir nuestro pan diario» adquiere mayor sentido cuando, bajo la especie del «pan roto», recibimos el Cuerpo de Cristo7. San Agustín también relaciona el pan diario con la «alimentación espiritual» que el creyente recibe en la Eucaristía8.
Uso litúrgico
En la Misa y el rito del Padre Nuestro
Durante la celebración eucarística, el sacerdote invita a la asamblea a rezar el Padre Nuestro; todos responden en común, y el sacerdote añade la embolismo que amplía la petición final, pidiendo la liberación del mal6. El Papa Francisco recuerda que la oración del Padre Nuestro, y en particular la petición del pan, «prepara al fiel para la comunión sacramental»9. El Papa Juan Pablo II destaca que la recitación del Padre Nuestro dentro de la Misa «toma una elocuencia particular» al estar inserta en el sacrificio del Cristo crucificado7.
Enseñanza catequética
Catecismo y compendios
El CCC 2861 describe la petición como expresión de confianza filial y como referencia tanto a la «alimentación necesaria» como al «Pan de Vida»3. El Compendio del Catecismo añade que la petición incluye el deseo de la Palabra de Dios y del Espíritu Santo, pidiendo que «Dios nos dé hoy» lo que es esencial para la vida4. La Catequesis de la Iglesia Ucraniana enfatiza que el pan cotidiano implica «pan para la existencia y “pan celestial” (la Eucaristía)10.
Dimensión social y solidaria
Llamado a la justicia y la caridad
El Papa Francisco subraya que la petición del pan diario recuerda a los que viven en precariedad, y que «el pan» también puede significar agua, medicina, trabajo y vivienda11. En la Congregación para el Evangelismo (JPII, Congreso Eucarístico 1997), se insta a los fieles a compartir el pan con los necesitados y a exigir una distribución justa de los bienes12. El Compendio del Catecismo pide que la oración inspire «solidaridad» para que la abundancia de algunos sirva a los necesitados13.
Historia de la traducción y variantes
La traducción al castellano «Danos hoy nuestro pan de cada día» se consolidó en la Liturgia latina y se mantuvo en versiones posteriores, pese a que traductores como los de la Rheims (1581) y la King James (1611) ofrecieron variantes como «pan cotidiano» o «pan del día»5. El término griego epiousion ha sido interpretado como «pan para el día» (quotidianum) o «pan para el mañana» (crastinum), lo que ha generado discusiones teológicas sobre la dimensión temporal versus eterna de la petición2.
Conclusión
La petición Danos hoy nuestro pan de cada día reúne en una sola frase la dependencia humana de Dios, la realidad sacramental del pan eucarístico y el compromiso social de los cristianos con los necesitados. Su presencia constante en la oración diaria, en la liturgia y en la enseñanza catequética la convierte en un pilar esencial de la vida cristiana, invitando a cada creyente a confiar en la providencia divina, a participar del banquete del Reino y a actuar con justicia y caridad en el mundo.
Citas
Sección segunda la oración del Señor, Catecismo de la Iglesia Católica, § 2759. ↩ ↩2
Geoffrey Wainwright. Hermenéutica evangélica en Jesús de Nazaret de Joseph Ratzinger, § 8. ↩ ↩2
Sección segunda la oración del Señor, Catecismo de la Iglesia Católica, § 2861. ↩ ↩2
Parte cuarta - La Oración Cristiana. Capítulo tercero - La vida de oración. Oración Cristiana, Promulgado por el Papa Benedicto XVI. Compendio del Catecismo de la Iglesia Católica, § 593 (2005). ↩ ↩2
La oración del Señor, The Encyclopedia Press. Enciclopedia Católica, §La Oración del Señor. ↩ ↩2
Capítulo II la estructura de la misa, sus elementos y sus partes - III. Las partes individuales de la misa - C. La liturgia de la Eucaristía - La oración del Señor, Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos. Instrucción General del Misal Romano, § 81 (2003). ↩ ↩2
Papa Juan Pablo II. Carta a los Sacerdotes, 1999, § 5 (1999). ↩ ↩2
De nuevo, sobre Mt. VI. Sobre la oración del Señor. A los competentes, Agustín de Hipona. Sermones sobre Lecciones Seleccionadas del Nuevo Testamento - Sermón 7, § 7 (426). ↩
«Él partió el pan», Papa Francisco. Audiencia General del 14 de marzo de 2018 (2018). ↩
Parte segunda - La oración de la Iglesia - IV. La oración personal del cristiano - C. El «Padre nuestro», Sínodo de la Iglesia greco-católica ucraniana. Catecismo de la Iglesia católica ucraniana: Cristo – Nuestra Pascua, § 679 (2016). ↩
Jesús nos enseña a pedir al Padre nuestro pan de cada día, Papa Francisco. Audiencia General del 27 de marzo de 2019 (2019). ↩
Papa Juan Pablo II. Viaje Apostólico a Polonia: 1 de junio de 1997, 46.º Congreso Eucarístico Internacional, § 4 (1997). ↩
Parte cuarta - La Oración Cristiana. Capítulo tercero - La vida de oración. Oración Cristiana, Promulgado por el Papa Benedicto XVI. Compendio del Catecismo de la Iglesia Católica, § 592 (2005). ↩
