José en Egipto (ascenso)
José, hijo primogénito de Jacob, pasó de ser esclavo vendido por sus propios hermanos a ocupar la posición más alta del gobierno egipcio, bajo el título de primer ministro o gobernador del país. Su historia, relatada en los capítulos 37‑47 del Génesis, es interpretada por la Iglesia Católica como un testimonio de la fe, la paciencia y la providencia divina. El relato muestra cómo, mediante la interpretación de los sueños del faraón, José no solo salvó a Egipto de una hambruna devastadora, sino que también garantizó la supervivencia de su familia y la revelación del plan salvador de Dios para el pueblo de Israel. Este artículo examina el contexto histórico‑bíblico, el proceso de ascenso, la interpretación teológica y el legado litúrgico y devocional de José en la tradición católica.
Tabla de contenido
Contexto histórico y bíblico
La vida de José antes de Egipto
José nació en la tierra de Canaán como el décimo hijo de Jacob y, a causa de su posición de favorito, despertó los celos de sus hermanos, quienes lo vendieron como esclavo a mercaderes que se dirigían a Egipto1. Desde joven mostró una capacidad especial para interpretar sueños, lo que más adelante sería clave para su destino1.
El exilio de la familia de Jacob
Años después, una gran hambruna obligó a Jacob a enviar a sus hijos a Egipto en busca de alimento. José, ya gobernador, reconoció a sus hermanos y, tras una serie de pruebas, los recibió y los reunió con su padre, cumpliendo la promesa de los sueños de su juventud2.
El ascenso de José en Egipto
La interpretación de los sueños del faraón
El faraón tuvo dos sueños que nadie pudo explicar: siete vacas gordas seguidas de siete vacas flacas, y siete espigas abundantes seguidas de siete espigas marchitas3. José, llamado de la cárcel por el copero, ofreció una interpretación que revelaba siete años de abundancia seguidos de siete años de escasez, y propuso un plan de almacenamiento de granos3,3. El faraón quedó asombrado y reconoció la sabiduría divina presente en José3.
La designación como gobernador y su administración
Impresionado, el faraón nombró a José segundo al trono, confiriéndole autoridad sobre la provisión de alimentos y la gestión de los graneros del reino4. José implementó un sistema de acumulación de granos durante los años de abundancia, garantizando reservas suficientes para los años de hambruna3. Esta política salvó a Egipto y a los pueblos vecinos de la muerte por inanición3.
La protección de la familia y la salvación del pueblo
Durante la hambruna, Jacob envió a sus hijos a Egipto para comprar grano. José, reconociéndolos, los puso a prueba antes de revelar su identidad, asegurándose de que la familia de Jacob recibiera sustento y protección2. Finalmente, la familia se estableció en la región de Gosén, donde prosperó bajo la protección de José5.
Interpretación teológica y espiritual
José como modelo de fe y paciencia
La Iglesia ve en José un ejemplo de fe inquebrantable y paciencia ante la adversidad. A pesar de la traición y la esclavitud, mantuvo su confianza en Dios, lo que le permitió cumplir el propósito divino6. Su resistencia a la tentación de la esposa de su amo, manteniendo su castidad, también es resaltada como virtud cristiana6.
El papel de la providencia divina
El ascenso de José ilustra la acción oculta de la providencia de Dios, que transforma el mal en bien para la salvación del pueblo. La interpretación de los sueños muestra cómo Dios revela su voluntad a través de medios inesperados, guiando a sus fieles hacia la redención4.
Influencia en la liturgia y devoción
San José, patrono de la Sagrada Familia, es honrado en la liturgia católica, especialmente el 19 de marzo, día de su fiesta. Su historia se menciona en oraciones y novenas que invocan su intercesión para la protección y providencia familiar7.
Legado y devoción en la Iglesia
Santos y fiestas
Además de su propia fiesta, la figura de José inspira la devoción a los padres y madres de la Iglesia, quienes buscan imitar su fidelidad y confianza en la providencia divina7.
Obras de arte y literatura
El relato de José ha inspirado innumerables obras de arte, desde pinturas renacentistas hasta óperas, y ha sido tema de autores como Cervantes y Bécquer, reflejando su impacto cultural y espiritual7.
Oraciones y rezos
Los fieles recurren a oraciones como la Novena de San José y la Oración por la Sagrada Familia para solicitar la misma protección y guía que José ofreció a su familia y a Egipto7.
Conclusión
El ascenso de José en Egipto constituye una pieza central de la tradición católica, mostrando cómo la fe, la obediencia y la providencia divina pueden transformar la adversidad en salvación. Su vida sirve como modelo de virtud para los cristianos, mientras que su legado perdura en la liturgia, la devoción popular y la riqueza artística que su historia ha generado. La figura de José sigue inspirando a los creyentes a confiar en el plan de Dios, aun cuando los caminos parezcan oscuros y llenos de pruebas.
Citas
La Nueva Versión Estándar Revisada, Edición Católica (NRSV-CE). La Santa Biblia, §Génesis 37. ↩ ↩2
La Nueva Versión Estándar Revisada, Edición Católica (NRSV-CE). La Santa Biblia, §Génesis 42. ↩ ↩2
La Nueva Versión Estándar Revisada, Edición Católica (NRSV-CE). La Santa Biblia, §Génesis 41. ↩ ↩2 ↩3 ↩4 ↩5 ↩6
Capítulo 11, Sulpicius Severus. Historia Sagrada, §Libro I, Capítulo 11 (380). ↩ ↩2
La Nueva Versión Estándar Revisada, Edición Católica (NRSV-CE). La Santa Biblia, §Génesis 47. ↩
Capítulo 4.— de los tiempos de Jacob y su hijo José, Agustín de Hipona. La Ciudad de Dios - Libro 18, §Capítulo 4 (426). ↩ ↩2
José, The Encyclopedia Press. Enciclopedia Católica, §José. ↩ ↩2 ↩3 ↩4
