Nuestra Señora del Buenviaje
Nuestra Señora del Buen Viaje, también conocida como Our Lady of the Good Voyage, es una advocación mariana que ha sido venerada históricamente por viajeros, marineros, migrantes y, en la época contemporánea, por personas que trabajan en el sector del transporte aéreo. Su intercesión se invoca para obtener protección y guía en los desplazamientos, ya sea por mar, aire o tierra, y su culto se ha difundido desde Europa hasta América Latina y Filipinas, adoptando diversas expresiones culturales y litúrgicas.
Historia
Orígenes europeos
La devoción a María bajo el título de protectora de los viajeros tiene raíces en la tradición europea medieval. En Italia, la Madonna di Loreto fue proclamada patrona y protectora de la «gente en vuelo», una figura que vigilaba a quienes se desplazaban por los aires y los mares1. En la península ibérica, la Nuestra Señora de la Cinta (Our Lady of the Belt) fue invocada por los marineros onubenses durante sus peligrosas travesías, convirtiéndose en un símbolo de seguridad en el océano2. Estas advocaciones sentaron las bases para la posterior aparición de la figura de Nuestra Señora del Buen Viaje, que combina la protección marítima y aérea en una sola imagen.
Expansión a América y Asia
Con la colonización española, la devoción se trasladó al Nuevo Mundo, donde comunidades de pescadores y navegantes adoptaron la imagen de la Virgen como guía en sus rutas transatlánticas. En Filipinas, la Virgen también fue invocada por los migrantes que cruzaban océanos en busca de nuevas oportunidades, reforzando la dimensión migratoria del título3. Así, la advocación se adaptó a distintas realidades culturales, manteniendo siempre el eje central de protección en el viaje.
Devoción y culto
Oraciones y novenas
Los fieles rezan novenas específicas a Nuestra Señora del Buen Viaje, pidiendo su intercesión antes de emprender cualquier trayecto. Estas oraciones resaltan la confianza en la «madre misericordiosa» que acompaña a los viajeros en su peregrinación terrenal4.
Peregrinaciones y festividades
En varios países se organizan peregrinaciones a santuarios dedicados a la Virgen del Buen Viaje, donde los devotos depositan ofrendas y agradecen los favores recibidos. Las celebraciones suelen incluir procesiones marítimas o aéreas, simbolizando la unión entre la fe y el acto de viajar.
La Virgen en el entorno aeroportuario
Desde la década de 1990, la devoción ha encontrado un nuevo espacio en los aeropuertos. En el aeropuerto «Leonardo da Vinci» de Fiumicino, los trabajadores y pasajeros son invitados a invocar a la Virgen como protectora de la «gente en vuelo», reforzando la continuidad del culto en la era de la aviación moderna5.
Patronazgo
Viajeros y peregrinos – La Virgen es considerada la protectora de quienes emprenden viajes largos o peligrosos, ya sea por tierra, mar o aire.
Marineros y pescadores – Su título de Estrella del mar la vincula directamente con la seguridad de los que navegan, como se refleja en los discursos papales que la describen como «estrella de los mares»6.
Migrantes y refugiados – La intercesión de Nuestra Señora del Buen Viaje es solicitada por personas que buscan un nuevo hogar, ofreciendo consuelo y esperanza en su travesía migratoria3.
Trabajadores del transporte aéreo – Pilotos, controladores y personal de aeropuerto recurren a ella para una travesía segura, reconociendo su papel como patrona de la «gente en vuelo»1.
Iconografía
La representación artística de Nuestra Señora del Buen Viaje varía según la región, pero comparte elementos comunes:
Manto protector: a menudo se muestra a la Virgen extendiendo su manto sobre un barco o un avión, simbolizando su cobertura protectora.
Estrella o faro: en algunas imágenes aparece una estrella que guía a los navegantes, aludiendo a su título de Estrella del mar6.
Objetos de viaje: cruces, brújulas o mapas pueden acompañar a la figura, resaltando su vínculo con la orientación y la seguridad.
Celebraciones litúrgicas
Aunque la fecha exacta de la fiesta varía según la localidad, la mayoría de los santuarios celebran una Misa Solemne en honor a la Virgen del Buen Viaje, acompañada de procesiones y actos de caridad hacia viajeros y migrantes. Las liturgias incluyen cantos marianos y la lectura de pasajes bíblicos que enfatizan la confianza en la guía divina durante el peregrinaje (por ejemplo, el Salmo 121 y la carta a los Hebreos 13, 14‑15).
Importancia cultural y social
El culto a Nuestra Señora del Buen Viaje ha influido en la vida cotidiana de muchas comunidades costeras y aeroportuarias. Festividades locales incluyen ferias, comidas tradicionales y la bendición de embarcaciones y aviones. Además, la devoción ha servido como puente espiritual entre diferentes grupos migratorios, ofreciendo un sentido de pertenencia y protección compartida en momentos de incertidumbre.
En síntesis, Nuestra Señora del Buen Viaje representa la continuidad de la tradición mariana como protectora de los viajeros, adaptándose a los cambios tecnológicos y sociales sin perder su esencia de intercesora amorosa y guía segura para todos los que se aventuran a cruzar caminos, mares y cielos.
Citas
Papa Juan Pablo II. 10 de diciembre de 1991: Celebración de la Fiesta de Nuestra Señora de Loreto en el Aeropuerto «Leonardo da Vinci» de Fiumicino - Roma - Homilía (1991). ↩ ↩2
Papa Juan Pablo II. 14 de junio de 1993: Misa en el Santuario de Nuestra Señora «de la Cinta», Huelva - Homilía (1993). ↩
Papa Francisco. Mensaje para la 110.ª Jornada Mundial del Migrante y del Refugiado 2024 (2024). ↩ ↩2
Papa Francisco. Santa Misa en la Fiesta de la Traslación de la milagrosa imagen de Nuestra Señora Salus Populi Romani (28 de enero de 2018) (2018). ↩
Papa Juan Pablo II. A los trabajadores del Aeropuerto de Fiumicino en Roma (10 de diciembre de 1991) - Discurso, § 1 (1991). ↩
Papa Juan Pablo II. A los pescadores y gente de mar (19 de marzo de 1987) - Discurso (1987). ↩ ↩2