Nuestra Señora del Pilar

Nuestra Señora del Pilar, conocida también como Nuestra Señora del Pilar de Zaragoza, es una de las advocaciones marianas más veneradas de la Iglesia Católica. Su origen se remonta a una antigua tradición que vincula a la Virgen María con el apóstol Santiago el Mayor, quien, según la leyenda, habría recibido la aparición de la Madre de Dios sobre una columna a orillas del río Ebro en Zaragoza, España. El santuario que alberga la imagen milagrosa, la Basílica del Pilar, se ha convertido en centro de peregrinación, símbolo de la fe española y punto de referencia para la devoción mariana en todo el mundo. El artículo explora la historia, la tradición, la arquitectura, la liturgia, los papados que han honrado el Pilar y su influencia cultural y espiritual.
Tabla de contenido
Historia y tradición
Origen legendario
Según la tradición española recogida en el Breviario Romano para el 12 de octubre, la Virgen María se apareció a Santiago el Mayor mientras este rezaba a la orilla del Ebro, pidiéndole que edificara un templo en su honor. La aparición se manifestó sobre una columna de mármol, de ahí el nombre Pilar1. Aunque historiadores como el monje Domènec Duchesne y el cardenal Baronius cuestionaron la historicidad del episodio, la tradición se sustentó en testimonios de San Jerónimo y del Oficio Mozárabe, y fue reforzada por la devoción popular desde el siglo XII1.
Desarrollo del santuario
El primer santuario dedicado a la Virgen del Pilar se habría construido por orden del propio Santiago, según la tradición, y posteriormente fue ampliado durante la Reconquista. La actual basílica barroca, iniciada en 1681, se erigió sobre la columna original y alberga la imagen de la Virgen, coronada en 1905 con una corona diseñada por el Marqués de Griñi1. La devoción creció rápidamente, convirtiéndose en foco de peregrinación y en símbolo de la identidad cristiana española2.
La imagen y su significado
Descripción artística
La imagen representa a la Virgen de pie sobre una columna, con los brazos extendidos en señal de acogida y aceptación del plan divino. Este gesto es interpretado como «sí» al plan de Dios, una referencia a la fiat mariana. El Papa Juan Pablo II, durante su visita a Zaragoza en 1982, describió la figura como «una expresión de aceptación del divino voluntad» y la llamó Pilgrim of faith and Virgin of the Way3.
Significado teológico
El Pilar simboliza la presencia constante de María en la historia de la salvación, actuando como mediadora y guía para los fieles. La columna representa la firmeza de la fe, mientras que la postura abierta de la Virgen invita a los peregrinos a confiar en la providencia divina. En la teología mariana, el Pilar es una manifestación del cuidado materno de María sobre la Iglesia, reforzando la idea de que ella «intercede por nosotros ante el trono del Altísimo»3.
El santuario del Pilar
Arquitectura y arte
La Basílica del Pilar es un conjunto monumental de estilo barroco, con fachadas ornamentadas, cúpulas y una gran cantidad de obras de arte. Entre sus tesoros destacan el retablo mayor, las capillas laterales dedicadas a diversos misterios marianos y la cruz de la victoria que se encuentra sobre la columna original. La basílica fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 2000, reconociendo su valor histórico y artístico.
Peregrinaciones y festividades
El 12 de octubre, día de la festividad de Nuestra Señora del Pilar, se celebra con una gran procesión, misas solemnes y actos litúrgicos que atraen a millones de peregrinos. La fiesta coincide con la fiesta nacional de España, reforzando la estrecha relación entre la devoción mariana y la identidad cultural del país. Además, el Camino de Santiago atraviesa Zaragoza, y los peregrinos suelen detenerse en el Pilar para recibir la bendición de la Madre de Dios antes de continuar su camino hacia Santiago de Compostela4.
Papas y visitas pontificias
Juan Pablo II
El Papa Juan Pablo II visitó el Pilar en noviembre de 1982, ofreciendo una homilía en la que resaltó la fidelidad de los españoles a la Virgen y la importancia del Pilar como símbolo de la fe. En su discurso, describió al Pilar como «un símbolo que reúne a los españoles alrededor de la Madre y Señora nuestra» y llamó a los fieles a vivir una fe activa y caritativa5,6.
Benedicto XVI
En 2005, el Papa Benedicto XVI dirigió una carta a los obispos españoles en el contexto de la peregrinación nacional al Pilar, recordando la definición del dogma de la Inmaculada Concepción y renovando la consagración de España al Inmaculado Corazón de María7.
Otros pontífices
El Papa Pío XII, en 1954, destacó la importancia del Pilar como una de las advocaciones más entrañables para el pueblo español, subrayando su papel como «fuente de gracia y bendición» en la misión evangelizadora de la Iglesia4.
Devoción y espiritualidad mariana
Oraciones y novenas
La devoción al Pilar incluye la Novena al Pilar, recitada especialmente en los diez días previos al 12 de octubre, y la Oración del Pilar, que invoca la intercesión de María para que «nos ayude a dar un sí definitivo al plan divino». Estas oraciones reflejan la confianza en la providencia divina y el modelo de obediencia mariana.
Impacto cultural
El Pilar ha inspirado arte, música y literatura a lo largo de los siglos. Pintores como Francisco de Goya y Juan de Valdés Leal representaron la imagen en sus obras, mientras que compositores han creado himnos y cantos marianos dedicados a la Virgen del Pilar. La devoción también ha influido en la identidad nacional española, siendo citada en discursos políticos y en la cultura popular como símbolo de unidad y fe.
Liturgia y calendario
Festividad litúrgica
El Calendario General de la Iglesia celebra el día de Nuestra Señora del Pilar el 12 de octubre, coincidiendo con la festividad de San Pedro y San Pablo en el rito romano. En la liturgia se emplea el propio de la Virgen del Pilar, que incluye lecturas que resaltan la aceptación del plan de Dios y la intercesión mariana.
Ritos y indulgencias
El Vaticano concede indulgencias plenarias a los fieles que visiten el Pilar el día de su fiesta y cumplan con los requisitos canónicos (confesión, comunión y oración por el Papa). Además, la Misa del Pilar incluye la cántico mariano «Salve Regina» y la bendición de la columna como acto simbólico de la fe.
Influencia internacional
Pilgrinaciones fuera de España
El culto al Pilar se ha extendido a América Latina, particularmente en México y Argentina, donde comunidades de origen español han fundado capillas dedicadas a la Virgen del Pilar. La devoción también se celebra en Filipinas, reflejando la herencia española y la universalidad del mensaje mariano.
Relación con otras advocaciones
El Pilar comparte elementos con otras advocaciones marianas, como Nuestra Señora de Guadalupe y Nuestra Señora de la Almudena, formando un circuito de devoción que fortalece la identidad católica hispana y su misión evangelizadora a nivel global8.
Conclusión
Nuestra Señora del Pilar representa la unión entre la fe mariana y la historia de España, sirviendo como faro espiritual para millones de creyentes. Su imagen, su santuario y la profunda tradición que la rodea continúan inspirando a los fieles a decir «sí» al plan divino, a vivir una fe activa y caritativa, y a peregrinar, tanto física como espiritualmente, hacia la casa del Señor.
Citas
Nuestra Señora del Pilar, The Encyclopedia Press. Enciclopedia Católica, §Nuestra Señora Del Pilar. ↩ ↩2 ↩3
Zaragoza, The Encyclopedia Press. Enciclopedia Católica, §Zaragoza. ↩
Papa Juan Pablo II. Discurso durante el rito del peregrino (Santiago de Compostela, 19 de agosto de 1989) - Discurso (1989). ↩ ↩2
Papa Pío XII. Radiomensaje a los participantes en el Congreso Mariano Nacional de España (12 de octubre de 1954) - Discurso (1954). ↩ ↩2
Papa Juan Pablo II. Liturgia de la Palabra: Zaragoza (6 de noviembre de 1982) - Homilía, § 1 (1982). ↩
Papa Juan Pablo II. 10 de octubre de 1984: Celebración de la Palabra en Zaragoza - Homilía (1984). ↩
Papa Benedicto XVI. Carta a los Obispos Españoles con ocasión de la Peregrinación nacional al Santuario de Nuestra Señora del Pilar en Zaragoza (19 de mayo de 2005), §Prefacio (2005). ↩
Capítulo I - Nos encontramos con Jesús a través de María, Papa Juan Pablo II. Ecclesia in America, § 11 (1999). ↩