Padre Gabriele Amorth

El Padre Gabriele Amorth (1925–2016) fue un presbítero de la Sociedad de San Pablo, sacerdote italiano y uno de los exorcistas más conocidos de la Iglesia Católica en la época contemporánea. Durante más de treinta años ejerció el ministerio del exorcismo en la diócesis de Roma, siendo discípulo directo del célebre Padre Candido Amantini, exorcista oficial del Vaticano. Su figura se ha convertido en un referente obligado para comprender la doctrina católica sobre el demonio, la acción extraordinaria del maligno y el ministerio del exorcismo, siempre dentro de la fidelidad al Magisterio.
Tabla de contenido
Vida y formación
Gabriele Amorth nació el 1 de mayo de 1925 en Módena (Italia). Durante su juventud participó activamente en la Resistencia italiana durante la Segunda Guerra Mundial. Tras el conflicto, ingresó en la Sociedad de San Pablo, congregación fundada por el Beato Santiago Alberione, caracterizada por el apostolado mediante los medios de comunicación.
Fue ordenado sacerdote en 1954. Durante décadas se dedicó principalmente al apostolado pastoral, catequético y periodístico, hasta que en 1986 fue nombrado exorcista de la diócesis de Roma por el cardenal Ugo Poletti. Este encargo marcaría definitivamente su ministerio.
La Iglesia enseña que algunos presbíteros reciben este encargo específico para el bien del Pueblo de Dios, ya que Cristo confió a su Iglesia autoridad sobre los espíritus malignos1.
Ministerio como exorcista
El Padre Amorth ejerció el ministerio del exorcismo durante más de treinta años, realizando miles de exorcismos, siempre bajo obediencia eclesial. Fue uno de los fundadores de la Asociación Internacional de Exorcistas, reconocida oficialmente por la Santa Sede.
En su enseñanza insistió repetidamente en varios puntos fundamentales:
- La existencia personal del demonio, como verdad de fe.
- La distinción entre posesión diabólica, opresión, obsesión e influencia ordinaria.
- La centralidad de los sacramentos, especialmente la Confesión y la Eucaristía, como defensa espiritual.
- La necesidad de evitar el sensacionalismo y la superstición.
Estas afirmaciones se apoyan directamente en la enseñanza de la Iglesia:
«El poder de Satanás no es infinito. No es más que una criatura»2.
Doctrina y pensamiento
El Padre Amorth fue siempre claro en subrayar que el exorcismo no sustituye la vida cristiana, sino que es un remedio extraordinario cuando existen causas extraordinarias. Su pensamiento puede resumirse en varios ejes:
El demonio en la fe católica
Amorth defendió con firmeza que negar la existencia del demonio contradice la Sagrada Escritura y el Magisterio:
«Satanás o el demonio y los otros demonios son ángeles caídos»3.
La autoridad de Cristo
El exorcista no actúa por poder propio, sino en nombre de Cristo y de la Iglesia, conforme al Ritual Romano:
«La Iglesia ejerce este poder recibido del Señor con fe y autoridad»4.
La vida sacramental
Para Amorth, el arma más eficaz contra el maligno es la vida de gracia:
«La victoria sobre el maligno se obtiene con la oración, la fe y los sacramentos»5.
Obras principales
El Padre Gabriele Amorth fue autor de numerosos libros de divulgación espiritual, escritos con un lenguaje claro pero doctrinalmente firme. Entre los más conocidos destacan:
- Un exorcista cuenta su historia
- Un exorcista: más historias
- Memorias de un exorcista
- Nuevos relatos de un exorcista
Estas obras no pretenden sustituir la teología académica, sino advertir pastoralmente sobre realidades espirituales frecuentemente olvidadas, cumpliendo así la misión de exhortación propia del sacerdote.
Controversias y discernimiento eclesial
Algunas declaraciones del Padre Amorth suscitaron debate, especialmente en entrevistas periodísticas. Sin embargo:
- Nunca fue sancionado por la Iglesia.
- Ejerció siempre su ministerio con licencia del obispo.
- Sus libros llevan imprimatur o no contienen errores doctrinales formales.
La Iglesia recuerda que toda experiencia debe ser discernida a la luz del Magisterio:
«El juicio sobre la autenticidad y el uso de estos dones pertenece a los pastores de la Iglesia»6.
Significado eclesial y espiritual
El Padre Gabriele Amorth representa una figura profundamente sacerdotal, marcada por la obediencia, la fe sencilla y la convicción de que Cristo es el verdadero vencedor. Su legado recuerda a los fieles que:
- El mal existe, pero Cristo ya ha vencido.
- El demonio actúa, pero Dios es infinitamente más poderoso.
- La vida cristiana ordinaria es la primera defensa espiritual.
Como enseña la Iglesia:
«El Hijo de Dios se manifestó para destruir las obras del diablo»7.
Citas
Ritual Romano, De Exorcismis et Supplicationibus Quibusdam, Praenotanda. ↩
