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Cruz

Papa Félix I

Papa Félix I
Esta ilustración es de Las Vidas y Tiempos de los Papas de Chevalier Artaud de Montor, Nueva York: The Catholic Publication Society of America, 1911. Fue publicada originalmente en 1842. Dominio Público.

San Félix I fue el vigésimo sexto obispo de Roma, sirviendo como Papa desde el año 269 hasta el 274 d.C. Su pontificado se desarrolló durante un período crucial para la Iglesia primitiva, marcado por la consolidación de la doctrina trinitaria frente a las herejías y los desafíos de la persecución romana. Aunque los detalles de su vida son escasos, se le recuerda por su papel en el fortalecimiento de la unidad eclesiástica y la autoridad episcopal, así como por su presunta contribución a las prácticas litúrgicas relacionadas con la veneración de los mártires.

Tabla de contenido

Pontificado y Contexto Histórico

San Félix I sucedió a San Dionisio como cabeza de la Iglesia romana a principios del año 269 d.C.1. Su papado abarcó un período de aproximadamente cinco años, desde el 5 de enero de 269 hasta el 30 de diciembre de 2742. Durante este tiempo, el Imperio Romano estuvo bajo el gobierno del emperador Aureliano2.

La Controversia de Antioquía y la Doctrina Trinitaria

Un evento significativo durante su pontificado fue la llegada a Roma de un informe del Sínodo de Antioquía, que había depuesto al obispo local, Pablo de Samosata, por sus enseñanzas heréticas sobre la doctrina de la Trinidad1,3. En respuesta a este informe sinodal, Félix I probablemente envió una carta al Oriente que contenía una exposición de la doctrina trinitaria. Sin embargo, este documento fue posteriormente interpolado por un seguidor de Apolinar para servir a los intereses de su secta, y este escrito espurio fue presentado en el Concilio de Éfeso en 4311,3. El fragmento conservado de este documento enfatiza la unidad e identidad del Hijo de Dios y el Hijo del Hombre en Cristo1.

Oposición al Montanismo

El pontificado de Félix I también se caracterizó por su firme postura contra el movimiento montanista, que representaba un desafío a las creencias cristianas ortodoxas2. Este énfasis en la consolidación de la Iglesia y el fomento de la unidad fue un aspecto central de su liderazgo2.

Desarrollo de la Autoridad Eclesiástica

Félix I también destacó la importancia del papel del obispo en la Iglesia, contribuyendo al desarrollo de la autoridad eclesiástica2.

Muerte y Veneración

Los detalles exactos de la muerte de San Félix I son inciertos. Aunque algunos relatos sugieren que pudo haber sido martirizado, esta afirmación no está respaldada por evidencias auténticas más antiguas y parece ser el resultado de una confusión de nombres1,2,3. La biografía del papa en el «Liber Pontificalis» lo presenta como mártir, pero esta información es contradicha por el calendario romano de fiestas del siglo IV, el «Depositio episcoporum», que lo incluye en la lista de obispos romanos y no en la de mártires1.

Lugar de Sepultura

Según el «Liber Pontificalis», Félix I construyó una basílica en la Vía Aurelia y fue enterrado allí1. Sin embargo, esta afirmación es considerada un error. El «Depositio episcoporum» indica que fue sepultado en la Catacumba de San Calixto en la Vía Apia, el 30 de diciembre1,3. La confusión sobre su martirio y lugar de sepultura probablemente se debe a la existencia de otro mártir romano con el mismo nombre, enterrado en la Vía Aurelia, sobre cuya tumba se construyó una iglesia1,4.

Fiesta Litúrgica

En el actual Martirologio Romano, el nombre de San Félix I aparece el 30 de mayo1. Esta fecha, que en el «Liber Pontificalis» se da como la de su muerte (III Kal. Jun.), es probablemente un error de transcripción de «Jun.» por «Jan.»1,3.

Legado y Atribuciones

El «Liber Pontificalis» atribuye a Félix I un decreto que establecía la celebración de Misas sobre las tumbas de los mártires («Hic constituit supra memorias martyrum missas celebrare»)1,3. Sin embargo, los estudiosos modernos sugieren que el autor de esta entrada se refería a la costumbre ya existente de celebrar el Santo Sacrificio de forma privada en altares cercanos o sobre las tumbas de los mártires en las criptas de las catacumbas (missa ad corpus)1. La celebración solemne de los Misterios Sagrados siempre tuvo lugar en las basílicas construidas sobre las catacumbas1. Esta práctica, que todavía estaba vigente a finales del siglo IV, se originó aparentemente en el período en que se construyeron las grandes basílicas cementeriales en Roma, a partir de los servicios solemnes de conmemoración de los mártires que se realizaban en sus tumbas en el aniversario de su entierro ya en el siglo III1. Es probable que Félix I no emitiera tal decreto, sino que el compilador del «Liber Pontificalis» se lo atribuyó porque no se apartó de la costumbre vigente en su tiempo1.

En resumen, San Félix I es recordado como un Papa que trabajó por la unidad y la ortodoxia de la Iglesia en un período desafiante, aunque muchos de los detalles específicos de su vida y acciones están envueltos en las complejidades de la historia temprana de la Iglesia.

Citas

  1. Papa San Félix I, The Encyclopedia Press. Catholic Encyclopedia, §Papa San Félix I. 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16

  2. Papa #26: San Félix I, Magisterium AI. Breve Historia de los Papas de la Iglesia Católica, §Papa 26: San Félix I (2024). 2 3 4 5 6

  3. Papa #3: San Anacleto, Magisterium AI. Breve Historia de los Papas de la Iglesia Católica, §Papa 3: San Anacleto (2024). 2 3 4 5 6

  4. Félix II, The Encyclopedia Press. Catholic Encyclopedia, §Félix II.