Papa Pío I

San Pío I fue el décimo Papa de la Iglesia Católica, cuyo pontificado se estima que duró desde aproximadamente el año 140 al 154 d.C. Su liderazgo se caracterizó por la defensa de la ortodoxia cristiana frente a las crecientes amenazas de herejías como el gnosticismo y el marcionismo. Aunque la tradición lo venera como mártir, las referencias históricas tempranas no lo confirman explícitamente. Contribuyó al fortalecimiento de la estructura eclesiástica primitiva y posiblemente a la estandarización de la fecha de la Pascua.
Tabla de contenido
Pontificado y Cronología
San Pío I fue el noveno sucesor de San Pedro, según una de las primeras listas papales proporcionadas por Ireneo1. Su pontificado se sitúa aproximadamente entre los años 140 y 154 d.C.1,2,3. Las fechas específicas de su papado (146-161) que aparecen en el Catálogo Liberiano se consideran cálculos erróneos de cronistas anteriores y no son aceptadas1. La cronología más fiable se basa en la muerte de San Policarpo de Esmirna, que ocurrió con gran certeza entre 155 y 156 d.C.1. Durante la visita de Policarpo a Roma el año anterior a su muerte, encontró a Aniceto, el sucesor de Pío, como obispo, lo que sugiere que la muerte de Pío tuvo lugar alrededor del año 154 d.C.1.
Orígenes y Familia
El Liber Pontificalis menciona que el padre de Pío se llamaba Rufino y que era originario de Aquileya1. Sin embargo, esta información podría ser una conjetura del autor1. Una nota en el Catálogo Liberiano, confirmada por el Fragmento Muratoriano, indica que un hermano de este Papa, llamado Hermas, fue el autor de la obra «El Pastor»1,4. Si la información que Hermas da sobre sus condiciones personales y su estatus (primero esclavo, luego liberto) fuera histórica y su parentesco con el Papa fuese cierto, entonces San Pío también habría nacido esclavo1,4. No obstante, es posible que la historia que Hermas narra sobre sí mismo sea una ficción1.
Desafíos Doctrinales y Defensa de la Fe
El pontificado de Pío I estuvo marcado por una intensa actividad en la comunidad cristiana de Roma, que ya se perfilaba como un centro importante de la Iglesia1. Durante este tiempo, la Iglesia romana enfrentó la propagación de diversas herejías1,5.
Gnosticismo y Marcionismo
Entre los herejes que visitaron Roma para difundir sus falsas doctrinas se encontraba el gnóstico Valentín, quien ya había aparecido bajo el pontificado del Papa Higino y continuó sembrando su herejía con cierto éxito1,5. Otro gnóstico, Cerdón, también estuvo activo en Roma en este período1.
El más notable de estos oponentes fue Marcion, quien llegó a la capital durante el pontificado de Pío I1,2,5. Pío I lo excluyó de la comunión, lo que llevó a Marcion a fundar su propia comunidad herética1. La Iglesia romana se vio «turbada por las herejías aliadas de los valentinianos y los marcionitas», y Pío «se opuso enérgicamente» a ellas5.
Campeones de la Ortodoxia
Frente a estas amenazas heréticas, maestros católicos también visitaron la Iglesia romana para exponer las enseñanzas cristianas1. El más importante de ellos fue San Justino Mártir, un converso judío, quien expuso la doctrina cristiana durante el pontificado de Pío y el de su sucesor, Aniceto1,5. San Justino fue un «gran campeón de la verdadera fe» en estas controversias5.
Contribuciones y Legado
San Pío I es reconocido por haber fortalecido la estructura de la Iglesia primitiva2. Se dice que ordenó a doce obispos y dieciocho sacerdotes5.
Establecimiento de la Pascua Dominical
Una de las posibles contribuciones de Pío I fue el establecimiento de la práctica de celebrar la Pascua en domingo, lo que habría ayudado a estandarizar las observancias litúrgicas2.
Decisiones Pastorales
El Liber Pontificalis menciona una decisión de este Papa de admitir y bautizar a los conversos judíos al cristianismo1. Sin embargo, el significado exacto de esta decisión no se conoce, y el autor del Liber Pontificalis podría estar refiriéndose a un decreto válido en la Iglesia de su propio tiempo1.
También se le atribuye haber convertido los Baños de Novato en un lugar de culto5.
Leyendas y Tradiciones
Una leyenda posterior asocia a Pío I con la fundación de dos iglesias en Roma: el titulus Pudentis (conocida como ecclesia Pudentiana) y el titulus Praxedis1. Según esta leyenda, también habría construido un baptisterio cerca de la primera y ejercido funciones episcopales allí1. Sin embargo, esta historia «no tiene credibilidad histórica», ya que estas iglesias surgieron en el siglo IV1. Es posible que reemplazaran casas cristianas anteriores, pero la leyenda no debe usarse como prueba1.
El «Pastor» en la obra de Hermas fue erróneamente aceptado en muchos escritos posteriores, como el Liber Pontificalis, como el nombre del autor1. Dado que a un sacerdote romano llamado Pastor se le atribuye un papel importante en la fundación de estas iglesias, es posible que el escritor de la leyenda se haya confundido y haya entrelazado al Papa Pío en su narrativa legendaria1.
Dos cartas atribuidas a Pío, dirigidas al obispo Justo de Vienne, no son auténticas1.
Martirio
Aunque San Pío I es venerado litúrgicamente como mártir, no hay una referencia temprana a su martirio2,5,4. Su veneración como mártir parece deberse a Cardenal Baronio5. La fiesta de San Pío I se celebra el 11 de julio1.
Conclusión
San Pío I, el décimo Papa, guio a la Iglesia en un período crucial de su historia temprana, defendiendo la fe contra herejías y contribuyendo al desarrollo de su estructura y prácticas litúrgicas. Su legado perdura como un ejemplo de liderazgo pastoral en tiempos de desafío doctrinal.
Citas
Papa San Pío I, The Encyclopedia Press. Enciclopedia Católica, §Papa San Pío I. ↩ ↩2 ↩3 ↩4 ↩5 ↩6 ↩7 ↩8 ↩9 ↩10 ↩11 ↩12 ↩13 ↩14 ↩15 ↩16 ↩17 ↩18 ↩19 ↩20 ↩21 ↩22 ↩23 ↩24 ↩25 ↩26 ↩27 ↩28
Papa #10: San Pío I, Magisterium AI. Breve Historia de los Papas de la Iglesia Católica, §Papa 10: San Pío I (2024). ↩ ↩2 ↩3 ↩4 ↩5
La lista de papas, The Encyclopedia Press. Enciclopedia Católica, §La Lista de Papas. ↩
B11: San Pío I, papa y mártir (155 d.C.?), Alban Butler. Vidas de los Santos de Butler: Volumen III, § 74. ↩ ↩2 ↩3
San Drostan, abad de Deer (c. 610 d.C.), Alban Butler. Vidas de los Santos de Butler: Volumen III, § 75. ↩ ↩2 ↩3 ↩4 ↩5 ↩6 ↩7 ↩8 ↩9 ↩10