Papa Ponciano

San Ponciano fue el decimoctavo obispo de Roma, sirviendo como Papa desde el 21 de julio de 230 hasta el 28 de septiembre de 235 d.C. Su pontificado es notable por ser el primero en la historia en el que un Papa renunció a su cargo. Esta decisión se tomó durante un período de persecución bajo el emperador Maximino el Tracio, cuando Ponciano fue exiliado a las minas de Cerdeña. Durante su exilio, se reconcilió con el antipapa Hipólito, poniendo fin a un cisma que había dividido a la Iglesia romana. Murió en el exilio y es venerado como mártir.
Tabla de contenido
Primeros Años y Elección
Los detalles sobre el nacimiento y la muerte de San Ponciano son inciertos1. Sin embargo, el Liber Pontificalis lo identifica como nativo de Roma, hijo de un hombre llamado Calpurnio1. Ponciano ascendió al papado el 21 de julio de 230 d.C.1,2. Su elección marcó el inicio de una crónica más detallada de los obispos romanos del siglo III1.
Pontificado y Desafíos
Durante el episcopado de Ponciano, la Iglesia romana enfrentó desafíos internos y externos.
El Cisma de Hipólito y la Reconciliación
Uno de los problemas más significativos fue la continuación del cisma de Hipólito, que había dividido a la comunidad cristiana en Roma1. Hacia el final del pontificado de Ponciano, se logró una reconciliación entre la facción cismática y su líder, Hipólito, con el obispo de Roma1. Este evento fue crucial para restaurar la unidad dentro de la Iglesia.
Condena de Orígenes
Después de la condena de Orígenes en Alejandría (231-232 d.C.), se celebró un sínodo en Roma, probablemente convocado por Ponciano, que ratificó las decisiones del sínodo alejandrino contra Orígenes1.
Persecución y Exilio
En el año 235 d.C., bajo el reinado del emperador Maximino el Tracio, se inició una persecución dirigida principalmente contra los líderes de la Iglesia1,2. San Ponciano fue una de las primeras víctimas, siendo desterrado a la inhóspita isla de Cerdeña junto con Hipólito1,2. Cerdeña era conocida por sus duras minas, que servían como colonia penal2.
Renuncia y Muerte
Para permitir la elección de un nuevo Papa y asegurar un liderazgo funcional para la Iglesia, Ponciano tomó la decisión sin precedentes de renunciar a su cargo el 28 de septiembre de 235 d.C.1,2. El Liberian Catalogue lo describe con la frase «discinctus est»1. Tras su renuncia, Antero fue elegido como su sucesor1.
Se desconoce cuánto tiempo más Ponciano sufrió las privaciones y el trato inhumano en las minas de Cerdeña1. Sin embargo, los antiguos Actos de los mártires, utilizados por el autor del Liber Pontificalis, indican que murió como consecuencia de los sufrimientos del exilio1.
Veneración como Mártir
El Papa Fabián (236-250 d.C.) hizo trasladar los restos de Ponciano e Hipólito a Roma en una fecha posterior1,3,4. Ponciano fue sepultado el 13 de agosto en la cripta papal de la Catacumba de Calixto1. En 1909, se descubrió su epitafio original en la cripta de Santa Cecilia, cerca de la cripta papal1. El epitafio, consistente con otros epitafios conocidos de la cripta papal, dice: PONTIANOS, EPISK. MARTUR (Ponciano, Obispo, Mártir)1. La palabra mártur fue añadida posteriormente1.
La lista de las Depositiones martyrum en la cronografía del año 354 lo incluye el 13 de agosto1. El Martirologio Romano celebra su festividad el 19 de noviembre1. También se le menciona como mártir en Cerdeña, exiliado por el emperador Alejandro, y que murió por ser apaleado hasta la muerte5.
Legado
El pontificado de San Ponciano, aunque breve, es significativo por su acto de renuncia, el primero en la historia papal, lo que demostró su compromiso con el bienestar de la Iglesia frente a la persecución2. Su reconciliación con Hipólito también puso fin a un cisma importante, promoviendo la unidad eclesial1.
Su inclusión en el Martirologio Romano y el descubrimiento de su epitafio confirman su veneración como santo y mártir en la tradición católica1.
Escritos Atribuidos
Aunque se le atribuye una epístola a Félix Subscribonius en las Falsas Decretales, que aborda el honor debido a los sacerdotes y la importancia de las buenas obras, la autenticidad de este documento es cuestionada, ya que las Falsas Decretales son una colección apócrifa6.
Citas
Papa Sto. Pontiano, The Encyclopedia Press. Enciclopedia Católica, §Papa Sto. Pontiano. ↩ ↩2 ↩3 ↩4 ↩5 ↩6 ↩7 ↩8 ↩9 ↩10 ↩11 ↩12 ↩13 ↩14 ↩15 ↩16 ↩17 ↩18 ↩19 ↩20 ↩21 ↩22 ↩23
Papa #18: San Pontiano, Magisterium AI. Breve Historia de los Papas de la Iglesia Católica, §Papa 18: San Pontiano (2024). ↩ ↩2 ↩3 ↩4 ↩5 ↩6
B20: San Fabián, papa y mártir (d.C. 250), Alban Butler. Vidas de los Santos de Butler: Volumen I, § 143. ↩
Papa Sto. Fabián, The Encyclopedia Press. Enciclopedia Católica, §Papa Sto. Fabián. ↩
B30 de octubre, Papa Benedicto XIV. El Martirologio Romano, § 30 de octubre (1749). ↩
La primera epístola del papa Pontiano - A Félix Subscribonius. Sobre el honor que debe concederse a los sacerdotes, Anónimo. Las Falsas Decretales (850). ↩