Papa Severino

Severino fue el 71º Papa de la Iglesia Católica, cuyo breve pontificado se extendió desde el 28 de mayo de 640 hasta el 2 de agosto del mismo año. Su elección, que ocurrió en octubre de 638, estuvo marcada por una prolongada vacante en la Sede de Pedro debido a la negativa del emperador bizantino a confirmar su nombramiento a menos que firmara la Ecthesis, una profesión de fe monotelita. Severino se mantuvo firme en su ortodoxia, defendiendo las dos voluntades y dos operaciones naturales en Cristo. A pesar de los desafíos políticos y las presiones imperiales, logró la confirmación y dedicó su corto reinado a afirmar la fe y a obras edilicias.
Tabla de contenido
Elección y Retraso en la Consagración
Severino, de origen romano e hijo de Abieno, fue elegido Papa a los tres días del fallecimiento de su predecesor, en octubre del año 6381. Sin embargo, su consagración se retrasó considerablemente, prolongando la vacante de la Sede de Pedro por más de un año y siete meses1. Este retraso se debió a la insistencia del emperador de Constantinopla en que Severino firmara la Ecthesis, una declaración de fe monotelita1.
El monotelismo era una doctrina que sostenía que, aunque Cristo tenía dos naturalezas (divina y humana), solo poseía una voluntad divina. Esta enseñanza era considerada herética por la Iglesia, ya que negaba la plena humanidad de Cristo con su propia voluntad humana, subordinada a la divina pero distinta1.
Firmeza Doctrinal y Presión Imperial
Severino se negó rotundamente a firmar el documento herético del emperador, manteniendo una postura firme en la ortodoxia católica1. Para forzar su cumplimiento, el exarca Isaac, representante imperial en Italia, saqueó el Palacio de Letrán1. A pesar de esta violencia y las presiones, Severino no cedió en su fe1.
Mientras tanto, los enviados papales en Constantinopla, aunque también se negaron a firmar documentos heréticos, actuaron con gran diplomacia1. Finalmente, lograron obtener la confirmación imperial para la elección de Severino1.
Pontificado y Legado
Una vez consagrado el 28 de mayo de 640, Severino declaró inmediatamente que, así como en Cristo había dos naturalezas, también había en Él dos voluntades y dos operaciones naturales1. Este pronunciamiento reafirmó la doctrina cristológica ortodoxa frente al monotelismo1.
Su pontificado fue excepcionalmente breve, durando solo poco más de dos meses, ya que falleció el 2 de agosto de 6401,2. Durante este corto período, además de su defensa de la fe, Severino contribuyó a la infraestructura eclesiástica al construir el ábside de la antigua Basílica de San Pedro, donde fue sepultado1.
El pontificado de Severino, aunque breve, se destaca por su compromiso con la ortodoxia y su resistencia a las presiones imperiales, consolidando la autoridad de la Iglesia en un tiempo de desafíos doctrinales y políticos2.
Confusión con Otros Santos de Nombre Severino
Es importante notar que a lo largo de la historia de la Iglesia, ha habido varios santos y figuras eclesiásticas con el nombre de Severino, lo que puede generar cierta confusión.
San Severino de Noricum (c. 480 d.C.)
Este Severino fue un ermitaño y evangelizador en Noricum (la actual Austria) en el siglo V3. Conocido por su piedad, milagros y su labor de redención de cautivos y ayuda a los pobres, pasó la primera parte de su vida en los desiertos de Oriente antes de predicar el Evangelio en Noricum3. Se le atribuye haber fundado varios monasterios y haber exhortado a la penitencia y la piedad3. Sus reliquias fueron trasladadas a Luculanum, cerca de Nápoles, y luego a Nápoles en el año 9104.
San Severino, Obispo de Septempeda (c. 550 d.C.)
La ciudad de San Severino en las Marcas de Ancona toma su nombre de un San Severino que se cree fue obispo allí a mediados del siglo VI4,5. Existe cierta confusión con San Severino de Noricum debido al traslado de las reliquias de este último a Nápoles4. El Martirologio Romano actual perpetúa esta confusión, aunque no hay evidencia de que Severino de Septempeda tuviera relación con Nápoles4.
San Severino, u Seurin, Obispo de Burdeos (c. 420 d.C.)
El Martirologio Romano lo menciona como «obispo de Colonia» al registrar su muerte en Burdeos6. Sin embargo, la investigación moderna ha establecido que no hay conexión entre él y Colonia, y que probablemente fue obispo de Tréveris antes de llegar a Burdeos6. Se distinguió por su celo contra el arrianismo y, según la leyenda, fue llamado a Burdeos por una revelación divina para suceder al obispo San Amando6.
San Severino Boecio, Mártir (524 d.C.)
Anicio Manlio Severino Boecio fue un filósofo y estadista romano, nacido alrededor del año 480, ejecutado en el año 524 bajo el rey godo Teodorico6,7. Aunque no fue un Papa, su historia está entrelazada con la de la Iglesia de su tiempo. Fue acusado de alta traición y martirizado, y su ejecución fue ordenada por Teodorico durante la ausencia del Papa Juan I, a quien el rey godo también encarceló por sospechas de conspiración7.
Es crucial distinguir al Papa Severino de estas otras figuras históricas para evitar inexactitudes en la comprensión de su biografía y pontificado1,2,4,6.
Citas
Papa Severino, The Encyclopedia Press. Enciclopedia Católica, §Papa Severino. ↩ ↩2 ↩3 ↩4 ↩5 ↩6 ↩7 ↩8 ↩9 ↩10 ↩11 ↩12 ↩13 ↩14
Papa n.º 71: Severino, Magisterium AI. Breve historia de los Papas de la Iglesia católica, §Papa 71: Severino (2024). ↩ ↩2 ↩3
San Severino de Nórica (c. 480 d. C.), Alban Butler. Vidas de los Santos de Butler: Volumen I, § 67. ↩ ↩2 ↩3
San Severino, obispo de Septémpeda (c. 550 d. C.?), Alban Butler. Vidas de los Santos de Butler: Volumen I, § 68. ↩ ↩2 ↩3 ↩4 ↩5
San Severino, The Encyclopedia Press. Enciclopedia Católica, §San Severino. ↩
San Severino, o Seurino, obispo de Burdeos (c. 420 d. C.), Alban Butler. Vidas de los Santos de Butler: Volumen IV, § 185. ↩ ↩2 ↩3 ↩4 ↩5
San Juan I, papa y mártir (526 d. C.), Alban Butler. Vidas de los Santos de Butler: Volumen II, § 410. ↩ ↩2