Rito bizantino
El Rito Bizantino, también conocido como el Rito de Constantinopla, es el segundo rito litúrgico más extendido en el mundo cristiano, después del Rito Romano1,2. Se originó en Capadocia y se desarrolló en Constantinopla a partir del rito de Antioquía, consolidándose con las reformas atribuidas a San Basilio el Grande y San Juan Crisóstomo1,2. Este rito es la forma de culto predominante en todas las Iglesias Ortodoxas y en numerosas Iglesias Católicas Orientales (conocidas como Iglesias Uniates o Católicas Bizantinas), incluyendo los Melquitas, Italo-Griegos, Ruthenians, Rumanos y Búlgaros, entre otros1,3. Aunque comparte una base doctrinal común con el Rito Romano, el Rito Bizantino posee una riqueza distintiva en su liturgia, teología, espiritualidad y disciplina, que constituyen una parte valiosa e inalienable del patrimonio universal de la Iglesia Católica4,5.
Tabla de contenido
Historia y Desarrollo
El Rito Bizantino no es uno de los ritos parentales originales, sino que se derivó del rito de Antioquía1,2. La comparación de ambas liturgias revela que Constantinopla siguió a Antioquía en la disposición de sus partes. Las dos liturgias orientales originales son la de Alejandría, donde la Gran Intercesión precede a la Consagración, y la de Antioquía, donde sigue a la Epíclesis. El uso bizantino, tanto en sus liturgias de San Basilio como de San Juan Crisóstomo, sigue el orden de Antioquía1.
La Influencia de San Basilio y San Juan Crisóstomo
La tradición de la Iglesia de Constantinopla atribuye la más antigua de sus dos liturgias a San Basilio el Grande (fallecido en 379), Metropolitano de Cesarea en Capadocia1. Se sabe que San Basilio llevó a cabo una reforma de la liturgia de su Iglesia, y el servicio bizantino que lleva su nombre representa su liturgia reformada en sus partes principales, aunque ha sufrido modificaciones posteriores1. San Gregorio de Nacianzo (fallecido en 390) y San Gregorio de Nisa (fallecido c. 395) también atestiguan las reformas de Basilio en el orden de las oraciones y la forma del servicio1. Prócolo de Constantinopla (fallecido en 446) menciona que San Basilio acortó la forma de la Liturgia para aliviar la fatiga del clero y los asistentes1.
La siguiente etapa crucial en la historia del Rito Bizantino fue la reforma de San Juan Crisóstomo (fallecido en 407)1. Él no solo modificó aún más el Rito de Basilio, sino que estableció tanto su propia liturgia reformada como la liturgia basiliana sin reformar como los usos exclusivos de Constantinopla1.
Expansión y Diversificación
Desde Constantinopla, el rito se extendió por la mayor parte de la Cristiandad Oriental a medida que crecía el poder de los patriarcas de la ciudad imperial2. Hoy en día, con la excepción de la Liturgia de Santiago utilizada ocasionalmente en Jerusalén y Zakynthos, el Rito Bizantino es seguido exclusivamente por todas las Iglesias Ortodoxas y por un gran número de Católicos Uniates, como los Melquitas en Siria y Egipto, y otros en los Balcanes, la monarquía Austro-Húngara e Italia1,2.
A diferencia del Rito Armenio, el Rito Bizantino no se ha limitado a un pueblo o idioma en particular, sino que se ha extendido por todo el Oriente cristiano entre las poblaciones eslavas, rumanas y griegas3. Sin embargo, en términos de jurisdicción y autoridad, no ha sido tan unido y homogéneo como el Rito Romano, ni ha sido uniforme en idioma, calendario o costumbres particulares, aunque se han seguido las mismas enseñanzas generales, rituales y observancias3.
Características Litúrgicas
La liturgia es un elemento central de la experiencia cristiana oriental, siendo su actividad principal en torno a la cual se construye el resto de la vida6. Las Iglesias Orientales han conservado celosamente una teología bíblica simbólica, explicada por los Padres, y mantienen un profundo sentido del misterio inefable que rodea el acto celebrativo4.
Lenguas Litúrgicas Oficiales
Las principales lenguas en las que se celebra la liturgia del Rito Bizantino son:
Eslavo Antiguo (utilizado por los Ruthenians, Búlgaros y Servios católicos, así como por los cismáticos rusos, búlgaros y servios)3,2.
Árabe (utilizado por los Melquitas católicos y los siro-árabes cismáticos)3,2.
Rumano (utilizado por los rumanos católicos de Transilvania y los cismáticos de Rumanía y Transilvania)3,2.
También se celebra en georgiano por un número reducido de fieles, y ocasionalmente en lenguas modernas con fines misioneros, aunque estos últimos usos no han sido oficialmente aprobados3,2.
Libros Litúrgicos
Para la celebración de los servicios litúrgicos, la Iglesia Bizantina utiliza varios libros7:
Typikon: Un «libro de ordenanzas» que corresponde a un Ordo romano, proporcionando instrucciones y un calendario para las diversas celebraciones litúrgicas8,9.
Liturgikon (o Hieratikon): Contiene las partes del sacerdote para el ordinario de la celebración eucarística y el oficio, junto con material suplementario8,10. Para un obispo, este libro se llama Archieratikon10.
Euchologion: Una «Colección de oraciones» que normalmente contiene el ordinario de Vísperas, Orthros, las liturgias eucarísticas de Crisóstomo y Basilio, la Liturgia de los Dones Presantificados, la administración de los sacramentos y diversas bendiciones o servicios ocasionales8,9. El Trebnyk es la versión eslava del Euchologion, que incluye los órdenes de los Santos Misterios, funerales, bendiciones y consagraciones11.
Octoechos: Contiene las partes variables de los oficios diarios para los siete días de la semana, divididas en ocho secciones para cada uno de los tonos del canto bizantino8,9.
Triodion: Incluye los propios desde el período pre-cuaresmal hasta el Sábado Santo8,12.
Pentekostarion: Contiene los propios desde la Pascua hasta el primer domingo después de Pentecostés, el Domingo de Todos los Santos8,12.
Menaia (o Menaion): Libros de los meses que contienen los propios para las conmemoraciones diarias de cada mes del año8,9.
Horologion: Contiene el ordinario y un número limitado de propios para los ocho oficios diarios (Servicio de Medianoche, Orthros, Prima, Tercia, Sexta, Nona, Vísperas y Completas)8,9.
Psalterion: El Salterio, dividido en 20 secciones (kathismata), e incluye nueve cánticos del Antiguo y Nuevo Testamento para Orthros8,9.
Evangelion: Contiene los cuatro Evangelios que se leen en la liturgia eucarística y en Orthros los domingos y festividades8,9.
Apostolos: Contiene las lecturas de los Hechos de los Apóstoles y las Epístolas, junto con los prokeimena (responsoriales) y los versos con el aleluya cantados después de la epístola en la Eucaristía8,9.
Heirmologion: Un libro litúrgico único que contiene las notaciones musicales para las melodías de los heirmoi y otros textos cantados durante los servicios de la iglesia11.
Arquitectura y Mobiliario Litúrgico
Una iglesia de Rito Bizantino debe tener un solo altar, aunque algunas iglesias muy grandes pueden tener capillas laterales con altares. La imitación de la multitud de altares latinos en una sola iglesia por parte de los Uniates es considerada un abuso inconsistente con su rito1. El altar (he hagia trapeza) se encuentra en el centro del santuario (ierateion) y está cubierto hasta el suelo con un paño de lino sobre el que se extiende una cubierta de seda o terciopelo1. Detrás del altar, alrededor del ábside, se encuentran los asientos para los sacerdotes, con el trono del obispo en el centro1. En el lado norte del altar se encuentra una gran mesa de credencia (prothesis), donde se dice la primera parte de la Liturgia. En el lado sur está el diakonikon, una especie de sacristía donde se guardan los vasos y vestimentas1.
Iglesias Católicas de Rito Bizantino
En los Estados Unidos, hay un número mayor de católicos de Rito Bizantino que de ortodoxos3. Las principales nacionalidades católicas que siguen este rito son los Ruthenians, Rumanos, Melquitas e Italo-Griegos3.
Ruthenians
Los Ruthenians, al unirse a la Santa Sede en 1595, conservaron en sus libros litúrgicos varias de las costumbres y fórmulas eslavas antiguas que luego fueron corregidas por el Patriarca Nikon en la Iglesia Ortodoxa13,14. La Santa Sede permitió que estas diferencias permanecieran siempre que no contradijeran la fe13,15. Sin embargo, en el Sínodo de Zamosc (1720), el clero griego ruthenian realizó una serie de cambios en el Rito Bizantino, especialmente en la Misa, para expresar más claramente la unidad e identidad de su fe con el Rito Romano, cambios que a veces son criticados como «latinizantes»13,15. La Sede Apostólica ha velado por la preservación integral del rito ruthenian, permitiendo solo cambios menores decretados por los propios obispos ruthenian en el Sínodo de Zamosc, y ha trabajado para restaurar sus ritos litúrgicos de acuerdo con sus veneradas tradiciones antiguas15,16.
Melquitas
Los Católicos Melquitas de Siria y Egipto también siguen el Rito Bizantino, utilizando el árabe en su liturgia3,17. Están bajo la jurisdicción de un patriarca que lleva los títulos de Antioquía, Alejandría y Jerusalén17.
Italo-Griegos
Estos católicos son de origen griego o albanés y usan el Rito Bizantino, residiendo principalmente en Sicilia y Calabria, con algunas colonias en Malta, Argel, Marsella y Cargèse en Córcega17,3. Su idioma litúrgico es el griego, aunque la lengua vernácula de los fieles es mayoritariamente el italiano17.
Rumanos
Los rumanos católicos de Transilvania también utilizan el rumano en el Rito Griego3.
Teología y Espiritualidad
Las Iglesias Orientales poseen una espiritualidad que se nutre directamente de la Sagrada Escritura y una teología menos sujeta a categorías estrictamente racionales4. Han mantenido una continuidad más directa con la atmósfera espiritual de los orígenes cristianos, lo que se considera una preciosa fidelidad a las fuentes de salvación4.
El Rito Bizantino, con su rica himnografía, cánones, tropariones y oraciones, es un vehículo para la expresión de la doctrina mariana, enraizada en los Padres de la Iglesia18. La Madre de Dios es omnipresente en la liturgia bizantina, evidenciado por sus íconos y santuarios18.
La liturgia es considerada no solo una actividad, sino un medio de revelación divina, indispensable para la proclamación del Evangelio6. Las tradiciones del Oriente cristiano son una parte esencial de la revelación divina, ofreciendo una perspectiva única de la comunicación de Dios con la humanidad y la comunión eterna con Él6. La Iglesia Católica valora altamente la vida cristiana de las Iglesias Orientales, reconociendo en ellas la tradición transmitida por los Apóstoles y los Padres, que forma parte de la herencia divinamente revelada e indivisa de la Iglesia universal5,19.
El Rito Bizantino en la Iglesia Católica
El Concilio Vaticano II, en su Decreto sobre las Iglesias Católicas Orientales, Orientalium Ecclesiarum, enfatiza el alto aprecio de la Iglesia Católica por la vida cristiana de las Iglesias Orientales5. Reconoce que en ellas «permanece visible la tradición que ha sido transmitida desde los Apóstoles a través de los Padres y que forma parte de la herencia divinamente revelada e indivisa de la Iglesia universal»5,19.
La Santa Sede ha demostrado un gran celo en proteger y preservar los ritos legítimos de los Ruthenians y otras Iglesias Orientales, asegurando que no se hicieran alteraciones sustanciales en sus liturgias y ceremonias14,15. Incluso se ha permitido la retención del calendario juliano entre ellos14. La prohibición de cambiar del rito oriental al latino, aunque no siempre absoluta en el pasado, se estableció firmemente en acuerdos posteriores, mostrando la importancia que los Romanos Pontífices daban a la preservación de los ritos orientales20,21.
Esta herencia de espiritualidad y liturgia, disciplina y teología, en sus diversas tradiciones, es declarada por el sínodo como perteneciente al carácter pleno católico y apostólico de la Iglesia19. Las diferentes expresiones teológicas de la doctrina en Oriente y Occidente son a menudo complementarias en lugar de conflictivas, y las tradiciones auténticas de la Iglesia Oriental tienen sus raíces en la Sagrada Escritura y se nutren en la vida de la liturgia19.
Citas
El rito de Constantinopla, The Encyclopedia Press. Enciclopedia Católica, §El Rito de Constantinopla. ↩ ↩2 ↩3 ↩4 ↩5 ↩6 ↩7 ↩8 ↩9 ↩10 ↩11 ↩12 ↩13 ↩14 ↩15 ↩16
Ritos griegos, The Encyclopedia Press. Enciclopedia Católica, §Ritos Griegos. ↩ ↩2 ↩3 ↩4 ↩5 ↩6 ↩7 ↩8 ↩9 ↩10
Ritos en los Estados Unidos, The Encyclopedia Press. Enciclopedia Católica, §Ritos en los Estados Unidos. ↩ ↩2 ↩3 ↩4 ↩5 ↩6 ↩7 ↩8 ↩9 ↩10 ↩11 ↩12 ↩13
Capítulo II - El valor inalienable del patrimonio particular de las iglesias orientales y la urgencia de su florecimiento - 9. Aspectos particulares del patrimonio de las iglesias orientales, Congregación para las Iglesias Orientales. Instrucción para la Aplicación de las Prescripciones Litúrgicas del Código de Cánones de las Iglesias Orientales, § 9 (1996). ↩ ↩2 ↩3 ↩4
Andrew J. Summerson. Deificación a través de la Cruz: Reflexiones de un adorador ideal implícito, § 3. ↩ ↩2 ↩3 ↩4
Nicolás Cabasilas y la teología litúrgica sana, Andrew J. Summerson. Deificación a través de la Cruz: Reflexiones de un adorador ideal implícito, § 4. ↩ ↩2 ↩3
Parte segunda - La oración de la iglesia - III. El tiempo y el espacio de la oración de la iglesia - B. El edificio de la iglesia—el lugar de la oración de la comunidad - 5. Artículos utilizados en los servicios divinos - D. Libros litúrgicos, Sínodo de la Iglesia Greco-Católica Ucraniana. Catecismo de la Iglesia Católica Ucraniana: Cristo – Nuestra Pascua, § 648 (2016). ↩
Rito bizantino: Libros litúrgicos, Edward G. Farrugia. Diccionario Enciclopédico del Oriente Cristiano, §Rito Bizantino: Libros Litúrgicos (2015). ↩ ↩2 ↩3 ↩4 ↩5 ↩6 ↩7 ↩8 ↩9 ↩10 ↩11
Libros litúrgicos, The Encyclopedia Press. Enciclopedia Católica, §Libros Litúrgicos. ↩ ↩2 ↩3 ↩4 ↩5 ↩6 ↩7 ↩8
Parte segunda - La oración de la iglesia - III. El tiempo y el espacio de la oración de la iglesia - B. El edificio de la iglesia—el lugar de la oración de la comunidad - 5. Artículos utilizados en los servicios divinos - D. Libros litúrgicos, Sínodo de la Iglesia Greco-Católica Ucraniana. Catecismo de la Iglesia Católica Ucraniana: Cristo – Nuestra Pascua, § 650 (2016). ↩ ↩2
Parte segunda - La oración de la iglesia - III. El tiempo y el espacio de la oración de la iglesia - B. El edificio de la iglesia—el lugar de la oración de la comunidad - 5. Artículos utilizados en los servicios divinos - D. Libros litúrgicos, Sínodo de la Iglesia Greco-Católica Ucraniana. Catecismo de la Iglesia Católica Ucraniana: Cristo – Nuestra Pascua, § 652 (2016). ↩ ↩2
Deificación a través de la Cruz: Reflexiones de un adorador ideal implícito, Andrew J. Summerson. Deificación a través de la Cruz: Reflexiones de un adorador ideal implícito, § 1. ↩ ↩2
Rito ruteno, The Encyclopedia Press. Enciclopedia Católica, §Rito Ruteno. ↩ ↩2 ↩3
Papa Pío XII. Orientales Omnes Ecclesias, § 27 (1945). ↩ ↩2 ↩3
Papa Pío XII. Orientales Omnes Ecclesias, § 35 (1945). ↩ ↩2 ↩3 ↩4
Papa Pío XII. Orientales Omnes Ecclesias, § 37 (1945). ↩
Iglesia griega, The Encyclopedia Press. Enciclopedia Católica, § Iglesia Griega. ↩ ↩2 ↩3 ↩4
Rito bizantino: La Madre de Dios, Edward G. Farrugia. Diccionario Enciclopédico del Oriente Cristiano, §Rito Bizantino: La Madre de Dios (2015). ↩ ↩2
Capítulo III: Iglesias y comunidades eclesiales separadas de la Sede Apostólica Romana - I. La consideración especial de las iglesias orientales, Concilio Vaticano II. Unitatis Redintegratio, § 17 (1964). ↩ ↩2 ↩3 ↩4
Papa Pío XII. Orientales Omnes Ecclesias, § 30 (1945). ↩
Papa Pío XII. Orientales Omnes Ecclesias, § 34 (1945). ↩