San Aquilino

San Aquilino es el nombre de varios santos venerados en la tradición católica, con al menos dos figuras prominentes: Santa Aquilina, mártir de Biblos, y San Aquilino, mártir de Fossombrone. También se hace referencia a «Aquilino» en contextos relacionados con ciudades italianas como L’Aquila y Aquileia, aunque estas menciones no se refieren directamente a un santo con ese nombre, sino a la herencia cristiana de dichas localidades. Este artículo explorará la vida y el martirio de Santa Aquilina y San Aquilino de Fossombrone, así como las referencias históricas a «Aquilino» en relación con la fe católica.
Tabla de contenido
Santa Aquilina, Mártir de Biblos
Santa Aquilina es una mártir de los primeros siglos del cristianismo, particularmente venerada en las Iglesias Orientales1.
Vida Temprana y Bautismo
Aquilina nació en Biblos, Fenicia, de padres cristianos. Fue bautizada por el obispo local Eutalio. Desde una edad temprana, demostró una fe inquebrantable1.
Martirio bajo Diocleciano
A la edad de doce años, durante la persecución de Diocleciano, Aquilina fue arrestada y llevada ante el magistrado Volusiano. Con gran valentía, confesó su fe cristiana. A pesar de las promesas y amenazas, su constancia no pudo ser quebrantada. Fue golpeada con látigos y finalmente decapitada1.
Actas Posteriores y Tradiciones
Las actas de su martirio, escritas en griego siglos después de su muerte, son consideradas poco fiables, aunque podrían contener un núcleo de verdad histórica1. Según estas narraciones, se le clavaron agujas al rojo vivo en los oídos, lo que la hizo desmayarse y ser dada por muerta. Su cuerpo fue arrojado, pero un ángel la rescató y la sanó completamente. Al día siguiente, se presentó nuevamente ante Volusiano, quien, sorprendido al verla viva, ordenó que fuera encarcelada y decapitada. Sin embargo, Aquilina expiró antes de que la sentencia pudiera ser ejecutada. Se dice que cuando se llevó a cabo la mutilación de su cuerpo ya sin vida, brotó leche en lugar de sangre1. Un passio griego de Santa Aquilina se encuentra impreso en los Acta Sanctorum, volumen III de junio1.
San Aquilino, Mártir de Fossombrone
Existe otra figura de San Aquilino, un mártir venerado en Fossombrone, Italia.
Martirio
El 4 de febrero, el Martirologio Romano conmemora a los santos mártires Aquilino, Gémino, Gelasio, Magno y Donato en Fossombrone2. Aunque los detalles específicos de su vida y martirio no se desarrollan extensamente en las referencias proporcionadas, su inclusión en el martirologio indica su reconocimiento como testigos de la fe que sufrieron por Cristo.
Referencias a «Aquilino» en Contextos Geográficos y Eclesiásticos
El nombre «Aquilino» o «Aquila» aparece en relación con importantes centros cristianos en Italia, lo que puede generar cierta confusión con los santos que llevan este nombre.
L’Aquila, Italia
La ciudad de L’Aquila en la región de Abruzos, Italia, tiene una rica historia eclesiástica. La archidiócesis de Aquila, directamente dependiente de la Santa Sede, fue erigida por Alejandro IV el 20 de febrero de 12573. La catedral de L’Aquila está dedicada a los mártires San Máximo y San Jorge3. La ciudad también es conocida por albergar el cuerpo de San Bernardino de Siena, quien falleció allí, y por ser el lugar de entierro de San Celestino V en el monasterio de Collemaggio3. El Papa Juan Pablo II visitó L’Aquila para venerar las reliquias de San Bernardino, destacando el espíritu de hospitalidad de sus habitantes4. Sin embargo, estas referencias no aluden a un santo llamado Aquilino como patrono o figura central de la ciudad, sino que el nombre de la ciudad se asemeja al del santo.
Aquileia, Italia
Aquileia fue una antigua y célebre ciudad del Imperio Romano, ubicada en la cabecera del Adriático, y durante siglos fue la sede de un importante patriarcado occidental5. La tradición antigua sostiene que la diócesis fue fundada por San Marcos, enviado allí por San Pedro5. La Iglesia de Aquileia se fundó sobre el testimonio de los mártires y, a pesar de las destrucciones bárbaras en los siglos IV y V, siempre tuvo la fuerza para resurgir6. Entre los santos asociados con Aquileia se encuentran San Valeriano, San Cromacio y el Patriarca San Paulino6. San Paulino de Aquileia (m. 804) fue una figura influyente en los siglos VIII y IX, conocido por su erudición y su oposición a la herejía adopcionista7,8. La ciudad fue un importante centro de irradiación misionera y defensa de la fe6. Al igual que con L’Aquila, el nombre de la ciudad no se refiere a un santo Aquilino, sino que comparte una raíz lingüística.
Conclusión
Aunque el nombre «Aquilino» se asocia con diferentes figuras y lugares en la historia de la Iglesia, las principales figuras santas son Santa Aquilina, la joven mártir de Biblos, y San Aquilino, mártir de Fossombrone. Sus vidas, aunque con detalles a veces escasos o legendarios, son un testimonio de la fe inquebrantable de los primeros cristianos frente a la persecución. Las ciudades de L’Aquila y Aquileia, si bien no están directamente relacionadas con un santo llamado Aquilino, son recordatorios de la profunda herencia cristiana y la presencia de numerosos santos y mártires que contribuyeron a la difusión y defensa del Evangelio en esas regiones6,3,5.
Citas
Santa Aquilina, mártir (¿finales del siglo III?), Alban Butler. Las Vidas de los Santos de Butler: Volumen II, § 542. ↩ ↩2 ↩3 ↩4 ↩5 ↩6
B4 de febrero, Papa Benedicto XIV. El Martirologio Romano, § 4 de febrero (1749). ↩
La Archidiócesis de Aquila, The Encyclopedia Press. Enciclopedia Católica, §La Archidiócesis de Aquila. ↩ ↩2 ↩3 ↩4
Papa Juan Pablo II. A las autoridades públicas (30 de agosto de 1980) - Discurso, § 1 (1980). ↩
Aquileya, The Encyclopedia Press. Enciclopedia Católica, §Aquileya. ↩ ↩2 ↩3
Papa Juan Pablo II. Al pueblo de Aquilea (30 de abril de 1992) - Discurso (1992). ↩ ↩2 ↩3 ↩4
San Paulino, patriarca de Aquileya (804 d.C.), Alban Butler. Las Vidas de los Santos de Butler: Volumen I, § 203. ↩
San Paulino II, patriarca de Aquileya, The Encyclopedia Press. Enciclopedia Católica, §San Paulino II, Patriarca de Aquileya. ↩