San Lorenzo de Brindisi
San Lorenzo de Brindisi, nacido Giulio Cesare Russo en 1559 y fallecido en 1619, fue un fraile capuchino italiano, célebre por su erudición poliglota, su predicación ardiente y su labor diplomática en defensa de la fe católica. Canonizado en 1881 y proclamado Doctor de la Iglesia en 1959, destacó en la conversión de judíos y protestantes, en la lucha contra los turcos y en el gobierno de su orden. Su vida combina santidad contemplativa con acción apostólica incansable, dejando un legado de escritos teológicos y una devoción mariana profunda.1,2,3
Tabla de contenido
Infancia y primeros años
Giulio Cesare Russo nació el 22 de julio de 1559 en Brindisi, en el Reino de Nápoles, de una familia veneciana acomodada. Sus padres, Guglielmo de Rossi (o Russi) y Elisabetta Masella, eran cristianos ejemplares que fomentaron en él una piedad precoz. Desde niño mostró signos de vocación religiosa: a los seis años ya pronunciaba sermones breves sobre el Niño Jesús durante las fiestas navideñas, según la costumbre italiana.1
Quedó huérfano de padre a los doce años y su madre lo confió a los frailes conventuales de Brindisi para su educación. Posteriormente, se trasladó a Venecia con su madre, donde estudió con los clérigos de San Marcos bajo la tutela de un tío. Allí conoció a los capuchinos, rama reformada de los franciscanos que impulsaban la renovación espiritual post-Trento.2,3
Entrada en la vida religiosa y formación intelectual
En 1575, con dieciséis años, ingresó en la Orden de los Frailes Menores Capuchinos en Verona, adoptando el nombre de Hermano Lorenzo. Profesó y cursó filosofía y teología en la Universidad de Padua. Su memoria prodigiosa le permitió dominar lenguas europeas como el latín, italiano, francés, alemán, bohemio y español, además de semíticas: griego, hebreo y siriaco. Se decía que conocía de memoria la Biblia en originales.1,4
Ordenado sacerdote en 1582, su talento oratorio se manifestó pronto: aún diácono, predicó Cuaresma en Venecia con gran éxito, extendiendo su ministerio a ciudades como Padua, Verona y Vicenza.4
Ministerio apostólico y misiones
Lorenzo fue un predicador itinerante por Europa, adaptando su estilo a las necesidades espirituales de los oyentes, al modo franciscano. Evangelizó Italia, Alemania, Austria y más allá, combatiendo el luteranismo y promoviendo conversiones.1
Conversión de judíos y herejes
En 1596, como definitor general en Roma, el papa Clemente VIII le encomendó instruir a los judíos. Su dominio del hebreo y conocimiento de la literatura rabínica impresionaron a rabinos, logrando numerosas conversiones en Roma y otras ciudades.1,4
En Alemania, fundó conventos en Viena, Praga y Graz, núcleos de provincias capuchinas contra la Reforma. Atendió a apestados y reconcilió herejes.4
Lucha contra los turcos
En 1601, el emperador Rudolf II lo envió a reclutar príncipes alemanes contra los turcos, que amenazaban Hungría. Lorenzo convenció a nobles y al duque de Mercœur. Como capellán imperial en la batalla de Albe-Royal (Szekes-Fehervar), arengó a 18.000 cristianos contra 80.000 otomanos, portando un crucifijo a caballo. La victoria se atribuyó a su intervención milagrosa.1,5
Gobierno de la Orden Capuchina
Lorenzo ocupó altos cargos: vicario general (1602-1605) y ministro general. Visitó provincias en Milán, París, Marsella y España con firmeza paternal. Fundó casas en Munich y Madrid. Rechazó reelección en 1605, priorizando la santificación personal.1,5,4
Su administración fortaleció la orden, combinando autoridad con caridad. Fue consejero de papas y príncipes.3
Virtudes, vida interior y milagros
A pesar de su ajetreo, mantuvo una intensa vida contemplativa. Celebraba la Misa en éxtasis frecuentes, con devoción al Rosario y la Virgen María, a quien invocaba en milagros: «Nos cum prole pia benedicat Virgo Maria». Su piedad franciscana era poética, con cantos marianos.1
Realizó prodigios en batallas y conversiones, atribuidos a protección divina. Su santidad unía acción y oración.5
Últimos años y muerte
En 1618, retirado en Caserta, fue llamado a España por napolitanos contra el virrey Osuna. Predijo no volver. Tras audiencias con Felipe III en Madrid y Lisboa, logró justicia pero agotó sus fuerzas. Murió el 22 de julio de 1619 en Lisboa, día de su cumpleaños y onomástico, en tierra de San Antonio. Fue sepultado con las clarisas de Villafranca.1,5,2
Obras y legado teológico
Sus escritos, en ocho volúmenes de sermones (italiano), tratados de oratoria, comentarios a Génesis y Ezequiel, y polémicas contra Lutero (latín, con notas griegas y hebreas), fueron examinados en beatificación: «Vere inter sanctos Ecclesiae doctores adnumerari potest»1. Editados en Opera omnia (1928-1956). Su mariología es profunda.5
Canonización y culto
Beatificado por Pío VI (1783), canonizado por León XIII (8 diciembre 1881). Proclamado Doctor apostólico por Juan XXIII (1959), cuarto centenario de su nacimiento.2,3 Fiesta: 21 julio. Es Doctor franciscano con San Antonio, San Buenaventura y Beato Duns Scotus.1
Papa Benedicto XVI (2011) elogió su paz diplomática: resolvió guerras entre príncipes y contra otomanos, modelo para hoy.3
En resumen, San Lorenzo de Brindisi encarna el ideal capuchino: erudito, pacificador y santo. Su vida inspira a ser fuentes de paz en un mundo conflictivo, fieles a la tradición católica.3
Citas
San Lorenzo de Brindisi, The Encyclopedia Press. Enciclopedia Católica, §San Lorenzo de Brindisi. ↩ ↩2 ↩3 ↩4 ↩5 ↩6 ↩7 ↩8 ↩9 ↩10 ↩11
Resumen biográfico, El Dicasterio para las Causas de los Santos. Lorenzo de Brindisi (1559-1619) - Biografía. ↩ ↩2 ↩3 ↩4
Papa Benedicto XVI. Lorenzo de Brindisi (1559-1619) - Audiencia General (2011). ↩ ↩2 ↩3 ↩4 ↩5 ↩6
San Lorenzo de Brindisi (A.D. 1619) (trasladado al 21 de julio), Alban Butler. Vidas de los Santos de Butler: Volumen III, § 176. ↩ ↩2 ↩3 ↩4 ↩5
B24: Sta. Cristina, virgen y mártir (fecha desconocida), Alban Butler. Vidas de los Santos de Butler: Volumen III, § 177. ↩ ↩2 ↩3 ↩4 ↩5