San Matías apóstol

San Matías, cuyo nombre significa «don de Yahvé»1, es conocido en la tradición católica como el apóstol elegido para ocupar el lugar de Judas Iscariote entre los Doce2,3. Su elección, registrada en los Hechos de los Apóstoles, subraya la importancia de mantener el número simbólico de los doce apóstoles, que representaban a las doce tribus de Israel4,3. Aunque las Escrituras ofrecen pocos detalles sobre su vida después de su elección, las tradiciones eclesiásticas lo presentan como un predicador del Evangelio y un mártir, destacando su fidelidad a Cristo hasta el final1,3.
La Elección de Matías
Tras la Ascensión de Jesús al cielo, la comunidad de creyentes en Jerusalén, que sumaba alrededor de ciento veinte personas, se reunió para orar4. En este contexto, San Pedro se puso de pie y propuso que se eligiera a alguien para reemplazar a Judas Iscariote, quien había traicionado a Jesús y había muerto4,3. Pedro citó las Escrituras, específicamente los Salmos, que decían: «Que su morada quede desolada, y que no haya quien habite en ella»; y «Que otro tome su cargo»4,5.
Requisitos para el Apostolado
Pedro estableció los criterios para el nuevo apóstol. La persona elegida debía haber acompañado a Jesús durante todo su ministerio público, desde el bautismo de Juan hasta el día de su Ascensión4,6. El propósito fundamental de esta condición era que el nuevo apóstol fuera un testigo ocular de la resurrección de Cristo4,3,6,7. Esta cualificación era esencial, ya que los apóstoles eran los primeros en dar testimonio de la vida, muerte y resurrección de Jesús3,5,8.
El Proceso de Selección
Se propusieron dos candidatos que cumplían estos requisitos: José, llamado Barsabás (también conocido como Justo), y Matías4,1,9. La comunidad, bajo la guía de Pedro, recurrió a la oración para discernir la voluntad de Dios4,10,6. Oraron diciendo: «Señor, tú que conoces los corazones de todos, muéstranos a cuál de estos dos has elegido para ocupar el lugar en este ministerio y apostolado del cual Judas se apartó para ir a su propio lugar»4,10.
Después de la oración, echaron suertes, y la suerte cayó sobre Matías4,1,10,11. De esta manera, Matías fue «contado con los once apóstoles», restaurando el número de los Doce4,3. Este acto de discernimiento comunitario, que buscaba la unidad y la comunión, fue un signo del amor que los apóstoles debían tener entre sí, como Jesús les había enseñado10.
Vida y Ministerio Posterior
Las Escrituras no proporcionan más detalles sobre la vida o el ministerio de San Matías después de su elección1,3. Sin embargo, la tradición eclesiástica ha intentado llenar estos vacíos, aunque la información es a menudo vaga y contradictoria1.
Tradiciones sobre su Predicación
Según Nicephorus, Matías predicó el Evangelio primero en Judea1. Otras tradiciones, como la Synopsis de Dorotheus, sugieren que evangelizó en Etiopía (identificada con la Cólquida), entre pueblos bárbaros y caníbales, en la región del puerto de Hyssus y el río Phasis1,12.
Tradiciones sobre su Martirio
Respecto a su muerte, las tradiciones también varían. Una de ellas afirma que fue crucificado en Etiopía1,12. Otra tradición sostiene que fue lapidado en Jerusalén por los judíos y luego decapitado1. El Martirologio Romano, por su parte, señala que Matías sufrió el martirio por predicar el Evangelio13.
Reliquias y Veneración
Se dice que Santa Elena llevó las reliquias de San Matías a Roma, y una parte de ellas se encuentra en Tréveris1. Sin embargo, ha habido dudas sobre la autenticidad de las reliquias en Roma, sugiriendo que podrían pertenecer a otro San Matías, obispo de Jerusalén alrededor del año 1201.
La Iglesia Latina celebra la fiesta de San Matías, que originalmente era el 24 de febrero, pero fue trasladada al 14 de mayo1. La Iglesia Griega lo celebra el 9 de agosto1.
Enseña y Legado Espiritual
Clemente de Alejandría atribuye a Matías una sentencia que enfatiza la mortificación de la carne: «debemos combatir nuestra carne, no darle valor y no concederle nada que pueda halagarla, sino más bien aumentar el crecimiento de nuestra alma por la fe y el conocimiento»1,12. Esta enseñanza probablemente se encontraba en el Evangelio de Matías, un texto apócrifo mencionado por Orígenes y Eusebio, aunque este último lo atribuyó a los herejes1,12.
A pesar de la escasez de detalles biográficos, la figura de San Matías es significativa por su fidelidad a Cristo y su papel en la restauración del colegio apostólico3. Su elección, realizada a través de la oración y el discernimiento comunitario, subraya la importancia de la unidad y la obediencia a la voluntad divina en la Iglesia primitiva10,6. Su vida, aunque poco documentada, sirve como un recordatorio de que, incluso ante la traición y la deserción, la misión de Cristo continúa a través de aquellos que permanecen fieles3.
Citas
San Matías, The Encyclopedia Press. Enciclopedia Católica, §San Matías. ↩ ↩2 ↩3 ↩4 ↩5 ↩6 ↩7 ↩8 ↩9 ↩10 ↩11 ↩12 ↩13 ↩14 ↩15 ↩16
Judas Iscariote y Matías, Papa Benedicto XVI. Audiencia General del 18 de octubre de 2006: Judas y Matías (2006). ↩
Papa Juan Pablo II. 14 de mayo de 1985: Misa en Maastricht (Países Bajos) - Homilía, § 1 (1985). ↩ ↩2 ↩3 ↩4 ↩5 ↩6 ↩7 ↩8 ↩9 ↩10
La Nueva Versión Estándar Revisada, Edición Católica (NRSV-CE). La Santa Biblia, §Hechos 1. ↩ ↩2 ↩3 ↩4 ↩5 ↩6 ↩7 ↩8 ↩9 ↩10 ↩11
Hechos I. 12, Juan Crisóstomo. Homilía 3 sobre los Hechos de los Apóstoles (404). ↩ ↩2
Papa Juan Pablo II. 14 de mayo de 1988: Celebración Eucarística en el aeropuerto de Trinidad (Bolivia) - Homilía, § 5 (1988). ↩ ↩2 ↩3 ↩4
Papa Juan Pablo II. Audiencia General del 25 de enero de 1989, § 4 (1989). ↩
Papa Benedicto XVI. 14 de mayo de 2010: Viaje Apostólico a Portugal con motivo del 10º Aniversario de la Beatificación de Jacinta y Francisco, jóvenes pastores de Fátima - Santa Misa en la Plaza «Av. dos Aliados» (Oporto), § 14 de mayo de 2010: Viaje Apostólico a Portugal con motivo del 10º Aniversario de la Beatificación de Jacinta y Francisco, jóvenes pastores de Fátima - Santa Misa en la Plaza «Av. dos Aliados» (Oporto) (2010). ↩
Los escritos de Papias, Eusebio de Cesarea. Historia Eclesiástica (Eusebio de Cesarea), §Libro III. Capítulo 39. 10 (325). ↩
Todo comienza con la resurrección de Cristo, Papa Francisco. Audiencia General del 12 de junio de 2019 (2019). ↩ ↩2 ↩3 ↩4 ↩5
Pánfilo. Una exposición de los capítulos de los Hechos de los Apóstoles, §B (300). ↩
Ss. Montano, Lucio, y sus compañeros, mártires (A.D. 259), Alban Butler. Vidas de los Santos de Butler: Volumen I, § 423. ↩ ↩2 ↩3 ↩4
B24 de febrero, Papa Benedicto XIV. El Martirologio Romano, § 24 de febrero (1749). ↩